Hace tan solo una semana de la macrooperación policial donde trece miembros de los Trinitarios fueron detenidos por la Guardia Civil en Salou (Tarragona) y los investigadores no han tardado en "bautizar" a la banda con un nombre particular: Las Termitas, por sus similitudes con estos insectos en el 'modus operandi'.

Las termitas son insectos que viven en nidos de colonias y que provocan plagas urbanas. Por fuera parecen simples hormigas inofensivas, pero en realidad son el enemigo número uno de los edificios que contienen madera. La organización en colonia de estos insectos es la similitud que mantienen con los bloques pandilleros, como los Trinitarios.

La organización criminal se encargaban de ajustar cuentas con narcotraficantes y obligarles a saldar sus cuentas. Traficaban con crack y cocaína. Los arrestados en la macrooperación policial son de origen dominicano y entre ellos hay líderes encargados de establecer las vinculaciones entre los diferentes grupos repartidos entre las comunidades autónomas y de dar las órdenes. En los Trinitarios también había tres menores de edad, que eran utilizados como "soldados" para ejecutar a las víctimas. 

De los nueve detenidos en Salou (Tarragona), tres adultos ya han ingresado en prisión provisional y tres menores en un centro de régimen cerrado en Barcelona. El resto de integrantes de la pandilla ha quedado en libertad provisional con medidas cautelares. A menudo es difícil saber todo lo que hay detrás de una organización criminal porque los miembros mantienen un pacto de silencio para no delatar al resto de integrantes, por lo que suelen acogerse a su derecho a no declarar.

¿Cómo se organizan?

Las organizaciones criminales tienen una estructura muy jerarquizada. Cada uno tiene su función. Se dividen en bloques. Como bien describen los investigadores, los miembros pasan por distintas fases hasta que se hacen con el mando de la banda y tienen roles diferenciados. En la cúspide están los reyes, debajo sus terratenientes y en la base los soldados, igual que las termitas. 

Aunque igual que las termitas, se reproducen rápidamente y cuentan con encargados de reclutar a adolescentes en centros escolares, parques, lugares de ocio o a través de las redes sociales. El nombre de los Trinitarios proviene de los principales revolucionarios durante la Guerra de la Independencia en la República Dominicana. La banda se originó en una cárcel de Nueva York donde los presos de la isla caribeña se hermanaron con el fin de protegerse de los ataques de los demás reclusos. Poco después, pasó a considerarse una organización criminal internacional que paradógicamente tiene entre sus principales rivales a los Dominican Don't Play, otra banda nacida un año después en el mismo lugar por compatriotas con los que se disputaban el control por el tráfico de drogas en las calles cuando quedaban en libertad.

El aumento de delitos hizo saltar la alarma

La operación policial empezó mucho antes. Concretamente, el verano pasado, cuando el Grupo de Información de la Comandancia de Tarragona detectó un incremento de actividades delictivas protagonizadas por jóvenes a los que pronto se pudo relacionar con el grupo violento juvenil Trinitarios. Estos pandilleros pugnan para controlar el territorio. Mantenían enfrentamientos con otros narcotraficantes para quedarse con el monopolio de la zona en la que estaban.

Delitos varios

Los Trinitarios asentados en Salou estaban cometiendo una gran variedad de delitos con la intención de financiar sus actividades ilegales: tráfico de drogas, robos con violencia, contra el patrimonio, estafas y usurpaciones de identidad eran su especialidad. Nueve personas fueron detenidas en dos viviendas de la localidad, una en la calle Amposta y otra en la calle Vendrell.

Un centenar de agentes participó en el dispositivo, considerado de riesgo, al desconocer cuál sería la respuesta de estos delincuentes. La benemérita desplegó a miembros de la Unidad Especial de Intervención (UEI) y del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS), dos unidades de élite, aunque no hubo ningún incidente.