Un joven de 35 años de Tailandia ha estado a punto de quedarse sin genitales en Tailandia. Hacía más de cuatro meses que llevaba un anillo metálico porque pensaba que, de esta manera, le crecería el pene. Después de tanto tiempo con la joya enganchada, los genitales se le empezaron a hinchar e intentó quitarse el anillo, pero no podía. Lo han tenido que operar de urgencia y lo han hecho en colaboración de los bomberos, que también han participado en esta surrealista operación.
Los hechos pasaron el sábado de la semana pasada en Nonthaburi, una provincia de Tailandia. La víctima es un hombre de 35 años que, el mes de junio, decidió ponerse un anillo metálico en el pene. Pensaba que, de esta manera, conseguiría que este aumentara su tamaño. Las primeras semanas, no tuvo ningún problema, pero al cabo de poco tiempo, vinieron las complicaciones.
Se había puesto el anillo para conseguir alargar el pene
El anillo provocó que se le irritara el pene y que se quedara atascado. Al hombre le daba mucha vergüenza de explicar qué había pasado y que no se podía sacar la joya de los genitales, pero como vio que la situación empeoraba y que le hacía mucho daño, decidió ir al médico y explicarlo todo. Confesó al doctor que se había puesto el anillo para conseguir alargar el pene.
En un primer momento, no pudieron retirar el anillo con el material que tenían en el centro médico y, por este mismo motivo, tuvieron que pedir ayuda a los bomberos. La operación fue muy complicada, ya que era muy complicado sacar un anillo de una zona tan sensible. Después de más 60 minutos en el quirófano, le pudieron sacar la joya.
A punto de amputarle los genitales por culpa del anillo
Según explican los médicos que intervinieron en la operación, el paciente les aseguró que hacía más de cuatro meses que llevaba el anillo enganchado al pene. El joven de 35 años, a pesar de todo, ha tenido suerte, ya que si hubiera tardado más a pedir ayuda, muy probablemente le tendrían que haber amputado los genitales para poder salvarlo.