Última sesión del juicio contra Angela Dobrowolski en la Audiencia de Barcelona acusada de intentar asesinar a Josep Maria Mainat. La exmujer del productor televisivo y miembro de la Trinca ha manifestado este viernes su visible decepción en el último turno de palabra porque, según ha dicho, hasta hace unas horas "estaba convencida" de que la acusación del empresario, su expareja, acabaría pidiendo su absolución. Además, ha remarcado que lo que hizo fue "luchar por su vida" y no intentar matarlo. El juicio ha quedado visto para sentencia.

Dobrowolski sobre la negativa de absolución: "Lo seguí creyendo en el fondo de mi alma"

"Cuatro años esperando este juicio y hasta hace unas dos horas yo estaba en mi interior convencida de que la acusación particular iba a pedir al final mi absolución, en mi interior lo seguí creyendo en el fondo de mi alma, es duro", ha recalcado durante su última intervención en la sección 20ª de la Audiencia de Barcelona. Todo ello mientras reafirmaba su postura de que no intentó acabar con su vida, sino socorrerlo cuando, supuestamente, notó que Mainat necesitaba atención: "Luchaba por su vida de la mejor manera que pude, respetando el protocolo que se me había enseñado, desde el momento en que le vi mal", ha concluido.

Angela Dobrowolski durante el juicio en la Audiencia de Barcelona / Kike Rincón, Pool, Europa Press

Dobrowolski, tras una semana de juicio y multitud de testigos, se ha mostrado confusa este viernes o al menos eso ha aparentado. Tanto es así que ha denunciado que no se hayan incluido unos supuestos vídeos de seguridad del despacho y ha cargado contra el informático al que ella habría llamado para desbloquear el portátil y que, según su declaración de este miércoles, se negó a hacerlo cuando vio que el dispositivo era del productor televisivo. "Es un mentiroso y no es coherente", le ha recriminado por relatar que ella le había pedido que recuperara los archivos del ordenador de Mainat.

Piden 13 años de prisión para Dobrowolski

El juicio ha quedado visto para sentencia y las peticiones de penas por intentar, supuestamente, asesinar a su exmarido la madrugada del 23 de junio de 2020 inyectándole insulina con la excusa de que era un medicamento adelgazante que él utilizaba habitualmente, eran diferentes, pero una vez Mainat perdonó a Dobrowolski el delito de revelación de secretos, se han unificado. El Ministerio Público pide 13 años de prisión, que con el delito perdonado sumaban 16, y la acusación particular del empresario pide 13, y un año más por la revelación que ha caído tras el documento de perdón.

Josep Maria Mainat al llegar al juicio en la Audiencia de Barcelona el pasado lunes / Kike Rincón, Europa Press

El fiscal: "Le inyectó insulina para matarle, lo demás es ciencia ficción"

El fiscal ha subrayado este viernes que la prueba practicada en el juicio contra Dobrowolski no deja "ninguna duda": "Le inyectó insulina esa noche para matarle, lo demás son elucubraciones fantasiosas, teoría de ciencia ficción". Así lo ha manifestado y ha remarcado que la acusada atentó contra la vida de Mainat, pero "no quería apechugar con las consecuencias, no quería que se descubriese la acción" y ha sentenciado que en ningún caso desistió de su objetivo: "Ninguna duda puede haber de cuál era la intención".