La Guardia Civil ha detenido este martes en Vilafranca del Penedès (Barcelona) y en otros municipios del Alt Penedès a varias personas, la mayoría de nacionalidad marroquí, por su relación con una banda criminal dedicada al tráfico internacional de hachís y al blanqueo de capitales. Desde primera hora se han hecho un total de diez registros en Vilafranca para decapitar a la organización. La explotación de esta investigación, que hacía meses que iba detrás de los ahora detenidos, se ha hecho con un gran despliegue policial con más de 150 agentes de la Guardia Civil. Unidades de intervención como el GAR, el GRS y la USECIC se han encargado de hacer los asaltos, coordinados desde el aire por un helicóptero del Servicio de Medios Aéreos del Instituto Armado.

Según las investigaciones hechas por la Guardia Civil, los detenidos, que podrían llegar a quince, se dedicaban al tráfico de este tipo de droga, que recibían desde Marruecos, hacia Europa. La mayoría de registros que han arrancado esta mañana se han hecho en pisos, donde viven los detenidos, pero también se ha accedido en como mínimo dos almacenes y trasteros. Durante toda la mañana se han visto agentes fuertemente armados protegiendo los inmuebles donde se estaban haciendo los registros.

Tráfico de hachís y blanqueo de capitales en Vilafranca

La investigación y esta última fase de explotación será clave para aclarar qué papel jugaban los detenidos y cuál era su negocio con la droga. Los investigadores de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Barcelona creen que los detenidos, entre los cuales hay los líderes de la banda y también lugartenientes, se encargaban de guardar y después distribuir el hachís que llegaba a Catalunya.

Los últimos días se han intervenido varias narcollanchas en la costa de Catalunya. La semana pasada un grupo de personas fueron detenidas mientras descargaban hachís en el Port de Mataró. En Tarragona se intervinieron también centenares de kilos de hachís y una lancha que estaba a punto de ser lanzada al mar. La Guardia Civil la encontró en un camión en Aldea, en un control de carretera. La presión que la misma Guardia Civil hace en el sur de la península, para bloquear la entrada de esta droga desde el Norte de África, hace que los narcotraficantes tengan que encontrar otras vías de entrada de la droga en España para después de también trasladada hacia Europa.