Este martes por la tardes los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional desplegaron, en la zona del barrio de Sant Antoni, un nuevo operativo para detectar, identificar y detener a ladrones multirreincidentes que actúan en el centro de la ciudad de Barcelona.
El que los Mossos han bautizado como operativo Tremall -el nombre viene de las redes de pescadores- hace más de un año que está en marcha y sirve para saturar puntos concretos de Barcelona para poder detener personas que se dedican a los hurtos en la vía pública y que ya son conocidos por los agentes de paisano de los Mossos.
Cazados por calle, identificados en el metro
En el operativo de este martes, agentes de paisano, conocidos como fures en el argot policial, rebuscaban por las calles de Sant Antoni a ladrones conocidos con el fin de ser llevados hasta el vestíbulo de la estación de Metro de Barcelona para ser registrados e identificados, tal como se puede ver en estas imágenes de ElCaso.com del chekpoint instalado en el suburbano.
Los Mossos d'Esquadra organizan estos dispositivos con la colaboración de agentes de Extranjería de la Policía Nacional. Es este cuerpo policial estatal quien tiene la competencia de aplicación de la Ley de Extranjería. La policía catalana aprovecha esta ley para sacar de la calle algunos de los ladrones, la mayoría de los detectados ayer, en situación irregular. No es la primera vez que la Policía de la Generalitat y la Policía Nacional española colaboran para hacer razzias contra ladrones en el centro de la ciudad.
Agentes de paisano de los Mossos en el metro identificando a posibles ladrones multirreincidentes / GRS
En algunas ocasiones estos dispositivos se hacen también con agentes de la Guardia Urbana de Barcelona. En el de este martes la policía de Barcelona no ha participado del operativo. Los Mossos d'Esquadra, además de los agentes de Seguridad Ciudadana y de paisano, también ha activado agentes del ARRO, con el fin de participar en los registros de los identificados. La Policía Nacional, por su parte, ha contado con agentes de la Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) y también de sus agentes antidisturbios, la UIP.
Sin balance de detenidos
El dispositivo fue comandado, a pie de metro, por el inspector subjefe de la comisaría del Eixample, que fue el encargado de diseñar y liderar este operativo antiladrones y de aplicación de la Ley de Extranjería. Según los datos de balance del operativo, los Mossos detuvieron seis personas y la Policía Nacional detuvo seis más. Los últimos, para incumplir la Ley de Extranjería.