Una niña desaparecida en Texas (Estados Unidos) ha sido identificada y localizada 41 años después del asesinato de sus padres. Una desaparición sin resolver y que gracias al análisis e investigaciones genéticas de ADN está más cerca de ser aclarado. "Baby Holly" ya tiene 42 años y vive en Oklahoma con sus 5 hijos, según ha anunciado la oficina del fiscal general de Texas, que ha llevado la investigación con la Unidad de Casos sin resolver y Personas Desaparecidas.

Un asesinato

En el 2021, la organización Identifinders International pudo poner nombre a dos cuerpos encontrados el año 1981 a través de pruebas genéticas. Entonces se supo que eran una pareja joven procedente de Florida. Se decían Tina Gail Linn Clouse, de 17 años, y Harold Dean Clouse, de 21. La sorpresa llegó después, cuando las autoridades pudieron saber que la pareja tenía una hija pequeña, Holly, que no se encontró con los restos de los Clouse. Y así empezó la búsqueda de Holly.

Gracias a los datos genéticos de los padres, ha sido posible encontrar a Holly, 41 años después. "Se han notificado a Holly las identidades de sus padres biológicos y ha conocido a su familia biológica por primera vez este martes", ha dicho el primer ayudante de la oficina del fiscal general de Texas, Brent Webster. El contacto ha sido telemático, pero pronto Holly viajará a Florida para conocer personalmente a sus parientes biológicos. Un final feliz para las familias Linn i Clouse, que hacía más de 40 años que no sabían nada de la niña.

Una iglesia en Arizona y una secta

Según la investigación, Holly fue abandonada en una iglesia de Arizona, y después fue adoptada por una familia, según Webster. El año 1981 no se resolvió el caso de la pareja asesinada, por este motivo los investigadores quieren aclarar los hechos. De hecho, el caso se ha extendido a varios estados como Texas, Florida y Arizona, y colaboran varios departamentos de policía que ahora pueden estirar el hilo. Un hilo que empieza, según Webster, con la búsqueda de las "dos mujeres que dejaron a la niña a la iglesia y que se identificaron como un grupo religioso nómada." "También tenían que renunciar a los bienes materiales", señala el ayudante del fiscal.

En diciembre de 1980, una mujer que se hacía decir Sor Susan contactó con la familia de los Clouse. Les dijo que la pareja había entrado en la secta y que su objetivo era cortar el contacto con el exterior, cosa que implicaba no ver ni hablar con los familiares, y se deshizo de sus posesiones materiales. Sor Susan quiso vender a los padres el coche de Dean, un AMC Concord rojo de dos puertas del año 78. Los padres avisaron a la policía y, cuando dos o tres mujeres con vestidos largos blancos se presentaron con el coche del Dean y la Tina, la policía las detuvo, pero no se ha encontrado ningún registro del informe policial del caso, según el ayudante del fiscal de Texas.

A pesar de todo, no se pudo seguir la pista de la secta religiosa y el asesinato quedó sin resolver. "Actualmente, en los Estados Unidos hay 270.000 asesinatos no resueltos; y en el estado de Texas, hay más de 20.000", dice Webster. Las autoridades policiales piden la colaboración ciudadana para descubrir más pistas sobre este caso.