La Policía Nacional, en colaboración con la Europol y la Interpol, ha detenido a una veintena de personas acusadas de pertenecer a una red internacional de pornografía infantil, tres de las cuales pilladas en varios municipios de Barcelona. Estos arrestos son especialmente graves, ya que dos de ellos tenían contacto habitual con menores a través de sus respectivas profesiones: un médico de familia de Granollers (Vallès Oriental) y un profesor de un colegio de Vilafranca del Penedès (Alt Penedès), los dos de nacionalidad española, según ha podido saber ElCaso.com. El tercer detenido, funcionario de El Masnou (Maresme) -nacionalizado, pero originario de Bolivia- descargaba y borraba de manera reiterada la aplicación de mensajería instantánea por la que los pedófilos compartían las imágenes prohibidas de los menores de edad para evitar que su familia se enterara de lo que hacía.
Estas tres detenciones se hicieron de manera simultánea, junto con otros cuatro en diferentes localidades del Estado español, ya que los investigadores tenían sospechas de que entre los siete mantenían una comunicación estrecha y querían evitar que el arresto de uno de los implicados alertara al resto. De esta manera, se hicieron entradas y registros en Granollers, Vilafranca del Penedès, El Masnou, Valladolid, Sevilla, Murcia y Jaén. Durante el dispositivo se decomisaron ordenadores portátiles, teléfonos móviles, discos duros y memorias USB llenas de imágenes de explotación sexual infantil. En el caso concreto del médico de Granollers, se descubrió que no solo consumía el contenido de esta red, sino que pagaba a chicas menores de edad de la Europa del Este para que le enviaran fotos y vídeos de carácter sexual.
Más de una decena de detenidos por todo el mundo
El operativo policial, que se puso en marcha gracias a las tareas de ciberpatrullaje llevadas a cabo por agentes especializados en los que detectaron la existencia de varios chats por donde los mensajes que se enviaban eran exclusivamente fotos y vídeos de pornografía infantil, ha permitido también la detención de otras trece personas de varios países. En concreto, en Honduras, Costa Rica, El Salvador, Brasil, Bolivia, Paraguay, Argentina, los Estados Unidos, Italia, Portugal y Bulgaria, y hay casi 70 personas investigadas de 28 países diferentes de todo el mundo.
Los agentes requisaron tres ordenadores de sobremesa, tres portátiles, 21 móviles, dos tablets, veinte memorias USB, tres tarjetas de memoria, un disco duro, dos CD, siete DVD, un proyector y una videoconsola. Para los detenidos que tenían contacto regular con menores de edad por su profesión, se les ha prohibido ejercer por el evidente riesgo que eso supone para la integridad de los niños y niños a quienes tenían acceso.