Susto de los grandes de un vecino del barrio de Roquetes de Barcelona este fin de semana mientras estaba paseando por la zona de Torre del Baró, en el distrito de Nou Barris, en la capital de Catalunya. Un paseo matinal que casi acaba en tragedia. Alrededor de las doce y media de la mañana el vecino encontró una granada de mortero abandonada en un lado del camino, en medio de unas hojas. Después de alertar al 112, los Mossos d'Esquadra se desplegaron a la zona y con la activación de los especialistas en desactivación de explosivos, se retiró el mortero con seguridad. Los agentes del TEDAX de la policía catalana se hicieron cargo de analizar el explosivo y retirarlo del camino de la forma más segura. Aunque no es habitual encontrar este tipo de artefactos en zonas como Collserola, sí que es cierto que de vez en cuando los Mossos d'Esquadra reciben avisos de personas que encuentran en el bosque artefactos de guerra no detonados de la Guerra Civil española de los años 30.
El mortero presenta un aspecto oxidado, hecho que hace pensar que ha estado en el exterior durante tiempo, pero todavía no se ha podido aclarar de donde ha salido, ya que la zona donde se ha encontrado es muy transitada y nadie antes la había detectado. Tampoco se ha registrado ningún movimiento de tierras últimamente y tampoco ningún aguacero la puede haber trasladado o hecho salir de bajo tierra. Fuentes de la policía catalana han explicado que se ha detectado algunas veces que algunos ciudadanos las encuentran en casas o terrenos particulares y las manipulan para abandonarlas en una zona pública a fin de que la policía las retire.
Mover los artefactos, sin saber si se trata de explosivos que todavía pueden ser activos o inestables, es un peligro, y desde los Mossos d'Esquadra recomiendan no tocarlos, señalizarlos y llamar al 112 a fin de que los TEDAX de los Mossos se encarguen de su neutralización y retirada.
Hace pocos días se encontraron once granadas de mano en la Terra Alta
La unidad especialista de desactivación de explosivos de los Mossos d'Esquadra, TEDAX, retiraron el miércoles de la semana pasada once granadas de mano de la Guerra Civil española en el municipio de Caseres, en la Terra Alta (Tarragona). Los artefactos se localizaron en la zona del Fort de Milet durante los trabajos de conservación hechos por el Consorcio Memorial de los Espacios de la Batalla del Ebro (COMEBE). Los agentes se llevaron las granadas en la sede de Lleida y, conjuntamente con otros artefactos encontrados recientemente, las hicieron explotar, de forma controlada, en una pedrera. En la zona de las Tierras del Ebro, donde la guerra española fue más cruenta, es más habitual que se encuentren este tipo de artefactos, utilizado por los dos bandos, y que no detonaron o que fueron escondidos durante la retirada.
La mayoría de servicios con explosivos reales que hace esta unidad especializada de los Mossos d'Esquadra y los especialistas de la Guardia Civil son para retirar artefactos no detonados de la Guerra Civil Española a las comarcas del Ebre, del Camp de Tarragona y de la Noguera.
Consejos si encuentras bombas en la montaña
La munición de guerra sin explotar también conocida como UXO (Unexploded Ordnance) es todo aquel explosivo que se disparó, dejar caer, tirado o proyectado, pero que no ha explotado a causa de un mal funcionamiento, por su diseño o por cualquier otro motivo. Aunque hace 80 años de la guerra, aparecen a Catalunya cada año una media de 1.000 de estos artefactos que no han explotado. Se calcula que harían falta entre 20 y 25 años más por limpiar de todos los artefactos que todavía quedan escondidos a Catalunya.
Los Mossos d'Esquadra recuerdan que este tipo de armamento de guerra es muy peligroso y destructivo. Es importante no cogerlo ni tocarlo, alejarse de la zona y avisar cuanto antes mejor al 112, de que se encargará de activar los Mossos y los especialistas del TEDAX.