El Estado español ha conseguido este año una medalla de plata, pero no está precisamente en un ámbito donde interese destacar. Según un estudio de Secure&IT, este sería el segundo país más afectado por los ciberataques de todo el mundo, viéndose superado tan solo por Rusia, el país más grande y el noveno con más población. Actualmente, los ciberdelitos son alrededor de un 20% de todos los delitos cometidos, y parece que la tendencia está en alza. Este tipo de actividades ilegales genera más dinero que la suma del tráfico de drogas, personas y armas multiplicado por dos.
El principal país de la península ibérica es uno de los preferidos de los ciberdelincuentes, sin embargo, ¿por qué? Resulta que la economía española es la cuarta potencia de la eurozona, es abierta y tiene grandes conexiones y presencia en todo tipo de mercados diferentes, lo que da más opciones a los estafadores, que pueden utilizar todas sus estrategias. El crecimiento español ha hecho más importante el país de cara al exterior, pero también ha puesto una diana en sus habitantes.
Como protegernos de los ciberataques
Desde el gobierno estatal son conscientes de esta situación, y ya están poniendo en marcha sus proyectos para proteger la ciudadanía con el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, pero aunque institucionalmente se busquen soluciones, lo mejor que podemos hacer para estar protegidos es prepararnos nosotros mismos y aprender a identificar estas amenazas. Con el fin de poder defendernos, los expertos nos recomiendan lo siguiente. Es muy importante tomarnos seriamente nuestras contraseñas, y buscar combinaciones que no sean fáciles de adivinar. Tenemos que evitar fechas, códigos numéricos como 0000 o 1234 y otras opciones que involucren nuestro nombre o datos personales. También es importante, como recordamos siempre, no dar nuestros datos a webs, correos o personas si no estamos seguros de quién se esconde detrás. Finalmente, es de gran ayuda activar el doble factor de autenticación, ya que, en caso de que todo el anterior falle y los estafadores consigan superar nuestras defensas, todavía necesitan saltar otra barrera.