Las estafas digitales se han convertido en uno de los delitos más populares. Ahora que todo el mundo está presente en el mundo digital, desde niños pequeños hasta personas mayores, los delincuentes han visto que el mercado de las estafas en línea tiene un gran futuro y un montón de potenciales víctimas. Desde de ElCaso.com hemos advertido de todo tipo de estafas, y ahora os traemos un recopilatorio de cinco de los más comunes y peligrosos a fin de que estéis mejor informados y, por lo tanto, mejor protegidos.
Skimming
Uno de los ciberdelitos más desconocidos puede ser el skimming o clonación. Este delito consiste en copiar los datos de la tarjeta de crédito para crear una falsa e ilegal que permite hacer compras no autorizadas sin necesitar el permiso del propietario. Este delito puede ser tanto virtual, robando los datos de la tarjeta, como físico, copiando el chip o la banda magnética de la tarjeta. Actualmente, se utilizan dispositivos escondidos en cajeros electrónicos que copian rápidamente los datos de la tarjeta al detectarlas. También pueden infectar las terminales de pago digital de algunos negocios para que llegue a los ladrones toda la información de la tarjeta.
Clonación de números móvil
Esta estafa es muy similar a la anterior, pero no se trata de copiar los datos de nuestra tarjeta, sino de crear un duplicado de nuestro número de teléfono, lo que puede dar acceso a los ciberdelincuentes a todas nuestras cuentas bancarias, correos, redes sociales... en definitiva, permite tener todos los datos que tengamos en nuestro móvil. Si obtienen un duplicado de nuestra tarjeta SIM pueden robarnos la identidad, al menos, con respecto a todo aquello relacionado con el ámbito digital. Para prevenirnos, lo mejor que podemos hacer es no compartir nuestro número de teléfono con ningún desconocido ni colgarlo en redes sociales o cualquier otro lugar donde todo el mundo lo pueda ver.
Smishing
El smishing consiste en mensajes trampa. A veces nos llegan SMS, correos o notificaciones diciéndonos que hemos ganado un premio o que somos el visitante número 1.000.000 y tenemos una recompensa. Este tipo de mensajes no nos dará dinero, sino que nos los sacarán. La idea es enviarnos a páginas web falsas que se quedarán con nuestros datos y, probablemente, nos instalarán virus en el dispositivo para tomarnos más información y dinero. Si vemos mensajes apresurándonos como"¡haz clic ahora!", o "últimos minutos para poder..." tenemos que sospechar: si nos dan prisa es para que no tengamos tiempo de pensar. También se puede detectar buscando faltas de ortografía, ya que muchos estafadores no se toman la molestia de vigilar cómo escriben, y eso nos puede dar muchas pistas para evitar ser estafados.
Pharming
El pharming consiste en instalar software fraudulento en el dispositivo para que nos envíe a páginas web que nos querrán vaciar la cuenta aunque hayamos escrito bien la dirección. En este caso es mucho más complicado detectar el problema, por lo tanto, lo más recomendable es revisar que tengamos el antivirus activo y utilizar el doble factor de autenticación para una mayor protección de nuestros datos personales. No tenemos que dejar tampoco de revisar cualquier cosa que nos haga sospechar y, en caso de duda, lo mejor es no clicar.
Manipulación de personas vulnerables
Esta última estafa es la más diferente, ya que no se basa en el dispositivo electrónico, sino en la persona. Muchas personas mayores acaban siendo víctima de este tipo de robos en que una persona habla con ellos por teléfono y les va dando conversación, haciendo que se sientan menos solos y, poco a poco, les van sacando dinero, pero muy habitualmente se hace con su consentimiento. Con el fin de tener alguien con quien hablar, las personas mayores aceptan hacer pagos y ayudar a los estafadores, a quienes acaban cogiendo cariño; de hecho, en muchos casos, ni siquiera acaban denunciándolos porque no los consideran malas personas.
Estas son las estafas más habituales hoy día, por lo que se recomienda ir con pies de plomo con todo el relativo al teléfono, ordenador, correo electrónico y todo tipo de cosas vinculadas con nuestros datos y nuestro dinero. Como recordamos siempre, lo más importante es no ceder nuestros datos a nadie si no estamos totalmente convencidos y asegurarnos de que la persona con quien estamos hablando o la página web que estamos visitando son fiables y no fraudulentas.