Los peligrosos grupos de WhatsApp con contenidos sensibles que aparecieron en Barcelona hace un mes vuelven a ser detectados a gran escala en las escuelas, en este caso en San Sebastián (Guipúzcoa). La Ertzaintza investiga dos chats colectivos de esta plataforma de mensajería instantánea por tener a más de mil menores de edad entre sus usuarios y difundir contenido pornográfico, homofóbico, machista y fascista. La denuncia hecha publica, por la cual la policía vasca prevé activar todos los protocolos de actuación, vino por parte del colegio Aldapeta María.

De hecho, según ha asegurado José Eizmendi, director de este centro concentrado, el más grande de la provincia, la escuela ha constatado la presencia de cerca de 200 alumnos en estos dos canales de WhatsApp. La mayoría son alumnos de primero y segundo de la ESO, aunque también hay algunos de tercero e incluso de Bachillerato. La investigación, tanto interna como de la policía, quiere descubrir si estos grupos habrían llegado también a estudiantes de la etapa de Primaria. 

Escuela Aldapeta María de San Sebastían en una imagen de archivo / EUROPA PRESS
Escuela Aldapeta María de San Sebastián en una imagen de archivo / EUROPA PRESS

Los dos chats de WhatsApp que investiga la Ertzaintza fueron creados con dos nombres: "Meter gente hasta que nos hagamos famosos" y "Hasta llegar al millón". En estos grupos, los administradores colgaban fotografías pornográficas y mensajes "totalmente inapropiados", "insultantes", "sexistas" y "vejatorios", según ha explicado Eizmendi. La escuela Aldapeta María, tras hacer pública la denuncia, ha asegurado que se reunirá este miércoles al mediodía con agentes de la policía vasca para saber cómo actuar y si puede interponer una demanda oficial al respecto. 

Caso Barcelona: un peligroso chat para niños de 12 años

Pero no es la primera vez que se da un caso similar en España. Uno de los últimos se descubrió en Barcelona, a mediados de octubre, donde se detectó un grupo de WhatsApp en el que se difundían vídeos pornográficos y de maltrato animal, así como mensajes racistas y homofóbicos. Por ello, los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación para esclarecer el origen de este chat, dado que contaba con decenas de menores de edad, muchos de ellos estudiantes, niños, de primero de ESO de entre 11 y 12 años. La mayoría entraron en esas conversaciones colectivas involuntariamente, dado que una persona desconocida tenía su número de teléfono y los añadió de forma anónima. El nombre del chat, en esta ocasión, era "Niños toda España" y tenía más de 200 participantes.