El verano acaba, y eso supone una vuelta a la rutina y una puesta a punto de todo, incluyendo el coche, que después de unos meses intensos, acumula mucha suciedad. El otoño, a pesar de no haber empezado todavía, ya se hace notar con cambios de temporal, bajadas de temperaturas y chaparrones intensos escampados por todo el territorio catalán. Estos últimos, contrariamente a lo que todo el mundo piensa, pueden ser tus mayores aliados a la hora de evitar las caras multas que la Dirección General de Tráfico (DGT) pone a aquellos conductores que llevan el coche demasiado sucio.

Un truco poco conocido puede ayudarte a limpiar el coche con el agua de la lluvia

Aunque es imposible mantener el coche limpio solo con el agua de la lluvia, hay un truco para, al menos, aprovechar las inclemencias del tiempo y que jueguen a favor tuyo y de tu coche, evitándote así una multa por llevar el coche demasiado sucio. La principal recomendación para que el coche esté limpio es no dejarlo al aire libre, alejándonos así de la creencia popular que la lluvia limpiará nuestro coche y lo mantendrá como los paños del oro. Aun así, una cosa es cierta: el agua de la lluvia, especialmente cuando cae con intensidad, puede ayudarnos a limpiar el vehículo o, al menos, a sacarle la primera capa de suciedad. Según expertos en la limpieza de coches consultados por La Vanguardia, la lluvia contribuye a desenganchar y ablandar los insectos o los excrementos de pájaros incrustados en los cristales o en la carrocería.

Por lo tanto, es recomendable que, si todavía no has limpiado el coche a fondo, esperes que pasen estos días de tormenta que se aproximan, dejar que la lluvia ablande la capa de suciedad que hay en el coche y, después, llevarlo a un túnel de limpieza o a un servicio especializado a fin de que quede bien limpio. A pesar del truco para aprovechar el agua de la lluvia, no es recomendable que cada vez que llueva el coche se moje, ya que la lluvia, cuando no cae de forma torrencial, lo que hace es enganchar todavía más la suciedad sobre la pintura y los vidrios de nuestro coche, hasta que se forma una capa muy difícil de quitar.

La DGT te puede sancionar con una multa de hasta 200 euros para llevar el coche sucio

Este truco es válido ahora, que la vuelta de las vacaciones es todavía reciente y la mayoría de la población no ha pensado en la importancia en tener el coche limpio, después de meses acumulando el polvo de la playa, los insectos y otros en los vidrios a raíz de largos viajes, o el barro en las matrículas. Sin embargo, y a pesar de parecer una leyenda urbana, la DGT puede sancionarte económicamente por llevar el coche sucio, con multas que van desde los 80 euros hasta los 200. Se valora, principalmente, que los cristales estén limpios y permitan una visión óptima, ya que toda la información necesaria para conducir se recibe a través de estos. No solo los cristales tienen que estar limpios, sino que la matrícula delantera y posterior también tienen que poder leerse perfectamente para detectar y rastrear el vehículo en caso de incidencia o falta.