Los responsables de la Dirección General de Tráfico (DGT) trabajan a diario para mejorar las condiciones de seguridad para los peatones, conductores y acompañantes en las calles y carreteras españolas. El objetivo de sus normas y medidas es que los accidentes que se produzcan sean cada año menos.

Es por eso que cada año hay actualizaciones en su reglamento, para intentar legislar sobre todos los elementos que puedan circular por las calles, calzadas o carreteras. Un ejemplo de ello es la nueva legislación sobre patinetes eléctricos, que están cada vez más presentes en las grandes ciudades.

También hay cambios muy importantes en los complementos que deben llevar los turismos, como el nuevo sistema ISA, que sustituirá pronto a los espejos retrovisores tradicionales. El objetivo es siempre el mismo: progresar y conseguir mejores sistemas de seguridad que eviten que haya más víctimas mortales en los accidentes que se producen cada año.

Las lluvias de barro pueden causar muchos problemas

En los últimos días varios puntos de España se han visto afectados por las lluvias de barro que ha producido la borrasca Celia y el polvo en suspensión que llega desde el Sahara. Lo que provoca que varios vehículos, casas y todo tipo de mobiliario urbano se haya llenado de una capa de tierra mojada que puede ser muy molesta.

Coches sucios EP (2)

Coches sucios / Europa Paress

Este problema ha llegado repentinamente, muchos conductores no estaban preparados para actuar rápidamente para limpiar sus vehículos antes de poder circular con ellos. La DGT recomienda siempre lavar el coche para que el cristal frontal y los espejos se encuentren en perfectas condiciones, sin elementos que puedan dificultar la visibilidad.

La multa de la DGT por llevar el coche sucio 

La Dirección General de Tráfico puede sancionar a los conductores que no tengan su coche en perfectas condiciones mecánicas, eso es sabido por todos. Pese a ello, también puede multar a los usuarios que no tengan sus coches limpios.

El Reglamento General de Circulación es muy claro en este aspecto: "La superficie acristalada del vehículo deberá permitir, en todo caso, la visibilidad diáfana del conductor sobre toda la vía por la que circula". En este caso, las partes indicadas son el cristal delantero, las ventanillas y el cristal trasero deben estar limpios para no dificultar la visibilidad del conductor, ya que podría ser uno de los motivos por los que tenga un accidente.

No son los únicos elementos que deben de estar limpios, las placas delantera y trasera también deben de poderse ver perfectamente para detectar y rastrear el vehículo y a su conductor en caso de incidencia o falta. También deben estar iluminadas correctamente.

Las sanciones que contempla la DGT para los conductores que no cumplan con las condiciones de limpieza obligatorias van desde los 80 euros a los 200. Por lo que se recomienda ser muy responsable en este aspecto para evitar cualquier tipo de problema o gasto inesperado.