El mercado laboral no hace más que transformarse y adaptarse a los nuevos tiempos, de manera que es común ver cómo surgen trabajos completamente nuevas, mientras otros oficios y trabajos van desapareciendo. Hoy en día podemos encontrar ofertas de trabajo de todo tipo en plataformas como LinkedIn o Infojobs, pero sigue habiendo oficios tan extraños y poco usuales que ni siquiera en estas plataformas veremos ofertas. Algunos son más divertidos, y otros resultan muy desagradables, pero son trabajos necesarios.
Extraños trabajos que resultan divertidos
Que sea un trabajo extraño no quiere decir que tenga que ser aburrida ni incómoda; de hecho, hay muchas que resultan divertidas o, cuando menos, agradables de realizar. Así pues, entre estos trabajos podemos encontrar personas que se dedican a testar la comodidad de los colchones, su jornada laboral consiste en dormir; después de la cabezada, es cierto que tienen que detallar la comodidad del colchón y explicitar cómo se ha desarrollado su descanso, seguramente la parte más aburrida de este trabajo de ensueño. También, en el sector de los "probadores", encontramos personas a quienes pagan para, por ejemplo, probar los toboganes acuáticos de los parques de atracciones. De la misma manera que las personas que prueban colchones, las que prueban toboganes dedican sus ocho horas a lanzarse incontables veces por estas atracciones, valorando la velocidad, la altura, aterrizaje y diversión.
Trabajos gastronómicos que son deliciosos y curiosos
El sector de la alimentación es uno de los más importantes y amplios, de manera que si en un sector encontraremos todo tipo de trabajos, está en este. Se ofrecen trabajos que principalmente consisten en probar los alimentos, como los inspectores de patatas fritas, que tienen que efectuar un minucioso estudio sobre que crujientes han quedado, si tienen buen color y, sobre todo, si su sabor es bueno. De la misma manera pasa con las personas que trabajan probando dulces y gominolas, que pueden probar, probar y oler una gran variedad de dulces antes que salgan en venta por asegurar que son aptos y tendrán éxito.
Otros trabajos son desagradables, pero necesarios
Aunque los trabajos comentados hasta ahora resultaban divertidos y entrañables, también hay otros trabajos que extrañas que son más bien desagradables, pero muy necesarias. Es el caso de las personas que trabajan oliendo sobacos con el objetivo de determinar que los desodorantes hacen su función y tienen buen olor antes de sacar el producto al mercado. No obstante, todavía hay trabajos más desagradables e incómodos, como las personas a quién contratan para ser la presa de centenares de mosquitos y probar así los productos que tienen que servir para repelerlos y calmar el picor del resto de personas.