"Empezamos a oír tiros, no sabíamos de dónde venían", este es parte del relato de uno de los testigos del tiroteo que la madrugada de domingo a lunes se registró en el polígono Sant Pau de Riu-sec de Sabadell y dejó a cinco personas heridas. De momento, hay más dudas que certezas en la investigación que están haciendo los Mossos para aclarar los hechos.

Entre los testigos de los hechos, como este, y los heridos, los agentes del Área de Investigación Criminal (AIC) de la Región Metropolitana Norte, están intentando aclarar qué pasó y qué originó el tiroteo.

Entre las hipótesis que tienen los Mossos, tal como adelantó ayer ElCaso.com, está la posibilidad que se trate de una revancha por un tema sentimental, como apuntó una de las víctimas, o de un enfrentamiento entre bandas dominicanas. No se descarta hoy por hoy ninguna motivación.

Se utilizaron dos armas en el tiroteo

Si bien en un primer momento, todo hacía pensar que un solo pistolero había abierto fuego contra el grupo que estaba haciendo botelló en esta zona -cada fin de semana hay, organizados de manera ilegal- los indicios recogidos por los investigadores en la zona parecen indicar que existió un intercambio de tiros y que no fue un solo pistolero quien abrió fuego contra el grupo.

Los especialistas de la policía catalana han podido identificar, hoy por hoy, como mínimo, dos tipos de vainas en la zona del tiroteo, según ha podido saber este medio. Las dos armas que se utilizaron son pistolas de calibre de 9 mm, pero diferentes, por lo tanto, como mínimo se dispararon dos armas. Ahora los Mossos intentan averiguar qué balas hirieron a quien y qué relación tenían los heridos entre ellos y también con los que abrieron fuego.

Rastro de sangre en la zona del tiroteo de Sabadell / ACN

En paralelo, la policía catalana también tiene que averiguar si un arma que se encontró en un vehículo en el lugar de los hechos, de una de las víctimas, también con munición de 9 mm, es la que se utilizó o no en el intercambio de tiros.

Secretismo en la investigación del tiroteo de Sabadell

De momento, el secretismo se ha apoderado de este caso, que todavía tiene muchas incógnitas. De las pocas cosas claras, que de los cinco heridos, dos de ellos resultaron heridos graves. Uno de los hombres como mínimo recibió cuatro impactos de bala. Una de las mujeres heridas, que estaba embarazada de siete meses, perdió a la criatura por culpa de uno de los tres.

Los otros tres heridos que se pudieron registrar, dos mujeres y un hombre más, están fuera de peligro y algunos fueron dados de alta en el mismo lugar de los hechos. Las piezas del rompecabezas del tiroteo, que todavía están por cuadra, hacen pensar a los investigadores que puede haber más personas heridas que no se quedaron a ser atendidas por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM).

Los Mossos d'Esquadra siguen sin aclarar los hechos más de 24 horas después del suceso. Del poco que confirman, asegurando que la investigación está en marcha, que todavía no se han hecho detenidos.

Los testigos relatan los momentos de miedo durante los hechos

"Empezamos a oír tiros, no sabíamos de dónde venían, y todo el mundo huyó corriendo", explica Hugo Silva, que se encontraba con unos amigos en el lugar, en declaraciones en la ACN.

Asegura, sin embargo, que no conocen ni a las víctimas ni al autor o los autores de los tiros. "Solamente veníamos a tomar alguna cosa, eso no nos lo esperábamos", lamenta.

Cristina Sugey se había desplazado con su hermano con el mismo objetivo. "Cuando estábamos cogiendo unos cubitos para el combinado empezamos a oír tiros y huimos corriendo, unos intentaron incluso saltar a la autopista, y al volver vimos a un chico con la camiseta llena de sangre", ha asegurado.