Los ladrones que se dedican a robar coches deberán tener cuidado con los vehículos que quieran llevarse a partir de ahora. Gracias al GPS, que normalmente va incorporado dentro, la policía tiene muchas facilidades para encontrar los turismos poco después de ser robados. Esto es lo que le pasó a un individuo que quiso llevarse un coche que no era suyo y que, seguro, se mirará antes la marca y el modelo si lo quiere volver a hacer. Los hechos tuvieron lugar el jueves, 13 de noviembre, cuando el propietario de un Mercedes GLA 220 entró en un establecimiento de Cubelles (Garraf) a hacer una compra y allí dejó la llave. Minutos más tarde, al salir de la tienda, vio que su turismo había desaparecido.
La víctima denunció los hechos a los Mossos d'Esquadra, que activaron un dispositivo para localizar el coche. El Mercedes llevaba incorporado un GPS y señalaba, en tiempo real, su ubicación. Rápidamente, los agentes descubrieron que el ladrón había puesto rumbo hacia Castelldefels (Barcelona)
Localizado en la C-31
Los Mossos pidieron ayuda a la Policía Local de Castelldefels y, en poco tiempo, los agentes de paisano montaron un control en la entrada del municipio, en la carretera C-31, para esperar que el ladrón apareciera con el coche robado. Finalmente, pocos minutos después, apareció el individuo.
Tras identificar al hombre y realizar las correspondientes comprobaciones, la policía lo detuvo como supuesto autor de un delito de robo o hurto de uso de vehículo de motor. Además, pudieron devolver el vehículo a su propietario sin ningún tipo de daño. El hombre, nacido en 1997 y con antecedentes policiales, pasó al día siguiente a disposición judicial ante el juez en funciones de guardia. La policía no ha comunicado la nacionalidad del individuo.
La sanción al detenido, sin embargo, será mínima. El Código Penal castiga el hurto de uso de vehículo de motor, en los casos en que no hay intención de quedarse con él, con multas o trabajos en beneficio de la comunidad.