Los Mossos d'Esquadra protagonizaron este miércoles una persecución policial digna de película por las montañas del Pallars Jussà. Después de una larga investigación por parte del Área de Investigación Criminal (AIC), los agentes de la policía catalana se disponían a desmantelar una macroplantación de marihuana en un bosque entre Senterada y la Vall Fosca, cuando los dos narcotraficantes que la controlaban, de origen albanés, huyeron corriendo.

Efectivos del ARRO, de Seguridad Ciudadana y Medios Aéreos trabajaron con el fin de localizarlos. Se formó un amplio dispositivo, en el cual también se activó un helicóptero para poder perseguirlos desde el aire. Finalmente, uno de los dos delincuentes pudo ser localizado y detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública. El otro narcotraficante, en cambio, consiguió huir de las fuerzas policiales y todavía se le está buscando. El operativo sigue en marcha con el fin de desmantelar el cultivo, ubicado en una edificación medio derribado en una zona de difícil acceso, y que consta de miles de plantas de marihuana.

Segunda plantación desmantelada en el Pallars en las últimas semanas

El operativo en Senterada se produce pocos días después de que el pasado 6 de septiembre los Mossos desmantelaran otra plantación de marihuana en medio del bosque en el Pallars, en aquella ocasión en el Sobirà, concretamente en el núcleo de Llagunes, en el municipio de Soriguera. Se intervinieron 2.800 plantas de marihuana de casi metro y medio de altura, con un valor de unos cuatro millones de euros en el mercado. Además, también se encontró diversa documentación y cinco teléfonos móviles. La policía catalana detuvo a seis personas, de entre 25 y 48 años, como responsables del cultivo. Tres de ellos pudieron ser arrestados al primer momento, mientras los otros intentaron huir por el bosque. Sin embargo, también acabaron detenido poco después.