Hace diez años que Susana Aragón, una mujer de Zaragoza, espera que la sanidad pública de Aragón lo opere de una distensión abdominal que sufrió después del nacimiento de su segunda hija en el hospital Miguel Servet de Zaragoza, abril de 2011.

Durante todo este tiempo la mujer ha sufrido las consecuencias de esta distensión abdominal que, según recoge su informe médico, se parece a tener una barriga de embarazada de nueve meses. La mujer se ha puesto en manos de abogados para reclamar que la operen. Ante la negativa de las instituciones de Salud de la comunidad de Aragón, la mujer ha recurrido a la Asociación Defensor del Paciente.

Susana Aragón espera que acepten la operación y, de manera paralela, reclama el pago de 117.000 euros, una cuota de 32 euros por cada día que ha pasado con la distensión, como indemnización, tal como ha explicado su abogado Ricardo Agóiz a El Periódico de Aragón. El procedimiento ahora se encuentra en manos de la justicia y la defensa de la mujer espera que sea un juez quien ordene al servicio de salud de Aragón ejecutar la operación.

Primero no le aceptaban la enfermedad

«El año 2011 di a luz a mi segunda hija, y al parto la niña venía de lado, y me estiraron los músculos de la barriga. Y así sigo hoy en día», ha explicado ella misma en una declaración que ha hecho acompañada de su abogado. Según recoge el mismo diario, la mujer ha sufrido las consecuencias de esta distensión abdominal. Asegura que ha perdido calidad de vida y ha tenido derivadas económicas.

Miguel Servet

Imagen del exterior del hospital Miguel Servet, en Zaragoza / EFE

Tuvo que cerrar su negocio, un restaurante, y tampoco encuentra trabajo. Explica que sus jefes no se creen que no esté embarazada de nueve meses, según parece por su barriga.

La mujer hace diez años que es a la lista de espera. Ya la avisaron de que no era una cosa urgente cuando le dijeron que lo operarían para tratar la distensión, pero en ningún momento, asegura, le dijeron que esta larga espera llegaría a los diez años. Tampoco fue fácil aclarar qué tenía. Aunque en un primer momento le dijeron que la situación era normal en una mujer en postparto, ella vio rápidamente que no era una situación que hubiera vivido con el nacimiento de su primera hija. Finalmente diagnosticaron esta distensión y la pusieron en la cola para ser operada. Hoy por hoy todavía no tiene hora.

Una lista de espera de 10 años

Ricardo Agóiz, responsable de la Asociación Defensor del Paciente, asegura que nunca había vivido una situación parecida, de una lista de espera que superara los diez años y más teniendo en cuenta que los daños físicos y psicológicos que está sufriendo la paciente. Agóiz seguirá luchando, ahora judicialmente, para conseguir que la mujer sea operada y por la indemnización que han reclamado, que supera los 117.000 euros.