Karim Bouyakhrichan desaparece del mapa. El peligroso gran líder entre las bandas de la Mocro Maffia, neerlandés de origen marroquí, fue capturado por la Policía Nacional en Marbella (Málaga) a principios de año, algo que fue celebrado por las autoridades de los Países Bajos que llevan años detrás de estas organizaciones de criminales marroquíes que atemorizan a medio país, con amenazas de muerte que llegan incluso a la heredera al trono, la princesa Amalia de Orange. La alegría, no obstante, fue efímera después que la Audiencia de Málaga dejara al capo en libertad con medidas cautelares y, tras un par de firmas en los juzgados, se escapara, muy probablemente, fuera de las fronteras españolas.

Esta polémica fuga ha tenido un proceso, como mínimo, convulso que ha facilitado -muy probablemente sin quererlo- la huida de Karim Bouyakhrichan. La Sección Primera de la Audiencia de Málaga dejó en libertad al mafioso, con las siguientes medidas cautelares: la retirada de pasaporte, la obligación de personarse en el juzgado cada 15 días y una fianza de tan solo 50.000 euros. Esto es, quizás, lo que más rechina de todo el proceso al haber sido acusado de tráfico de cocaína y blanqueo de capitales de más de seis millones de euros en España. Según explica Diario Sur, el líder de la Mocro Maffia firmó en tribunales de fuera de la citada provincia andaluza el 1 y 15 de marzo y el 1 de abril. Desde este día no se ha vuelto a saber nada de él y se cree que ya está lejos de España.

Riesgo de fuga y orden de detención

Pero hay más. Más allá de las medidas cautelares, y pese a estar la Fiscalía Antidroga en contra de la libertad del mafioso, no se activó la Orden de Detención y Entrega (OED) emitida por los Países Bajos. Esta OED fue tramitada antes de la detención del capo en Marbella. ¿Por qué se quedó en el limbo? Pues, tal y como explica el medio citado, la OED llegó a la Audiencia Nacional que la pasó, como es habitual, al Juzgado Central de Instrucción número 2 y de ahí se tramitó, pero la Audiencia Provincial de Málaga se negó a activarla al tener Karim causas pendientes en España, entre otros el narcotráfico y blanqueo de capitales. 

Karim Bouyakhrichan en una imagen de archivo

Por ello, no se procedió a la extradición a Países Bajos, dado que tenía que ser juzgado antes, aunque la Audiencia Nacional tampoco decretó la OED, algo que podría haber hecho. Según ha avanzado Diario Sur, los jueces reconocen que existía "riesgo de fuga" al ser el capo mafioso extranjero, neerlandés de origen marroquí, y sin bienes en territorio español. Ahora no saben dónde puede estar el gran líder de las bandas de la Mocro Maffia, que estaba en búsqueda y captura desde 2018 y estaba catalogado como el "delincuente más peligroso y buscado" de los Países Bajos.

¿Quién es Karim Bouyakrichan?

Karim es el hermano de Samir Bouyakhrichan, considerado uno de los grandes líderes entre los clanes más importantes de la Mocro Maffia, que tiene su sede central en Países Bajos. Samir, con tan solo 35 años, fue asesinado durante un tiroteo en Benahavís (Málaga) en 2014, sobre las dos de la madrugada del pleno mes de agosto mientras tomaba algo acompañado en una terraza de la localidad malagueña. Lo acribillaron a balazos, rematando los dos sicarios el trabajo con varios tiros en la cabeza. Fue un ajuste de cuentas, o eso parecía, y Karim saltó de golpe a la primera línea de su clan con el alias Taxi.

Fue en ese momento cuando Karim asumió el mando y logró afianzar su presencia en Málaga, Marbella, Barcelona y Melilla, en lo que respecta a territorio español, y creó ramificaciones en Marruecos, República Dominicana, Países Bajos (principal base de operaciones de las bandas de la Mocro Maffia) y Emiratos Árabes. Los Bouyakhrichan llegaron, incluso, a emplear sociedades vinculadas a la embajada española en Tailandia para blanquear sus ingresos ilícitos, aunque nunca con la connivencia de los funcionarios, según explicaron los investigadores de la Policía Nacional tras las detenciones de principios de año.