El exnovio de Rocío Caíz Pozo, la menor de 17 años y madre de un bebé de meses, desaparecida desde el pasado 3 de junio en Martín de la Jara, Sevilla, ha confesado que la mató y la descuartizó, lanzando sus restos a varias zonas del municipio de Estepa.
El exnovio de Rocío Caíz confiesa que la mató
Según han informado fuentes de la investigación, el joven se presentó la tarde de este jueves en el cuartel de la Guardia Civil de Estepa, preguntando por el responsable, 24 horas después de ser interrogado como testigo.
Acompañado de un abogado, declaró que mató a la menor el mismo día que desapareció, la descuartizó y se deshizo del cuerpo.
En su relato, el joven, de 23 años y nacionalidad rumana, explicó que mató a Rocío, su exnovia de 17 años y madre de su bebé, el día de su desaparición con un cuchillo que lanzó a un contenedor y que no ha podido ser localizado.
Además, ha concretado que después descuartizó el cuerpo y lanzó bolsas con sus restos por varios lugares del extrarradio del pueblo, para luego irse a su casa a dormir.
Una menor desaparecida en Sevilla
Por la mañana, la madre de Rocío la llamó porque no la localizaba y el chico le dijo que había pasado allí la noche, pero que al despertar se había marchado y no sabía dónde estaba.
Y entonces Ana, una hermana de la fallecida, recibió un mensaje enviado presuntamente por Rocío en el que le decía que se había ido a Badajoz con un joven que había conocido meses antes y con quien se quería casar, y pedía que su exnovio se hiciese cargo del hijo de ambos.
La familia de Rocío nunca creyó que ese mensaje lo enviase la joven, y sospechaba de que le habían robado la contraseña de su perfil de Facebook, ya que su móvil estaba apagado, pero la ventana de mensajes privados de la red social estaba activa.
Mensajes falsos, robo de dinero y huida a Badajoz
En otro de los presuntos mensajes, Rocío decía a su hermana que le había robado de madrugada 300 euros a su exnovio para fugarse, cosa que el ahora confeso asesino confirmó a la madre de la menor.
Aunque su familia afirma que había sufrido agresiones por parte del exnovio en varias ocasiones, Rocío nunca presentó denuncia por violencia de género, y sus datos no están reflejados en el registro VIOGEN, que recoge las informaciones de las mujeres que denuncian hechos similares en servicios sociales de ayuntamientos o cualquier fuerza y cuerpo de seguridad del Estado.
Su familia aseguró este lunes que en alguna ocasión había sufrido heridas como la rotura de la nariz de la que no dio una explicación convincente.
La menor había conocido a su exnovio cuando ella tenía 11 años y él 16, y se quedó embarazada a los 16 años. Finalmente rompieron la relación con el niño recién nacido, hace cuatro meses.
Viaje en taxi de Martín de la Jara a Estepa para ver al exnovio
El pasado jueves, decidió ir a casa del exnovio a recoger un carrito para el bebé desde su pueblo, Martín de la Jara, a 28 kilómetros de Estepa, en un taxi pagado por la expareja. El conductor fue la última persona que la vio con vida.
La Guardia Civil mantiene acordonada la casa del asesino confeso, y pasadas las doce y media de la noche ha acudido a la casa de su madre, para establecer también un dispositivo de vigilancia en la puerta.
Mientras tanto, el joven de 23 años guía a la Guardia Civil a diferentes zonas de la localidad donde, según su testimonio, habría arrojado sus restos y ahora se rastrean.
Se declara inocente y confiesa después
Antes de la jornada de hoy protagonizó varias entrevistas en las que defendía su inocencia, aunque los investigadores ejercieron sobre él una "presión pasiva", vigilado sin que lo supiera y esperando que cometiese un error, hasta que este jueves ha acudido a la Guardia Civil a confesar el crimen.
La joven Rocío Caíz es la víctima número 18 de violencia de género del 2021 en España y su hijo, de 4 meses, el séptimo huérfano por el mismo motivo en lo que va de año, según fuentes del Ministerio de Igualdad.