Encuentran sano y salvo al bebé de 13 meses secuestrado en Nuévalos (Zaragoza). Lo han conseguido localizar gracias a un testigo clave que vio el rapto en directo y que ha sido capaz de memorizar la matrícula del coche con el que se lo llevaron. En total, hay tres detenidos: el padre de la criatura, un amigo suyo y el abuelo del pequeño.
Después de 24 horas de agonía, por fin han podido devolver al niño a la madre, que fue brutalmente agredida en el aparcamiento del Monasterio de Piedra de Nuévalos, donde pasaron los hechos. Según la investigación de la Guardia Civil, fue abordada por el padre de la criatura, que es su expareja, también investigado por violencia de género. El hombre no lo hizo solo, pidió ayuda a su padre: entre los dos se lo quitaron de las manos a plena luz del día cuando estaban a punto de volver a casa.
Secuestro del bebé de 13 meses en Nuévalos
Se trata de un secuestro pensado al detalle, ya que lo planearon al milímetro: padre e hijo abordaron a la víctima al parking y se llevaron al bebé con el coche, poniendo en peligro la integridad física del pequeño durante el forcejeo. La madre llamó a Emergencias 112 aterrizada y, en cuestión de pocos minutos, llegaron los guardias civiles y explicó detalladamente qué había pasado.
Según explica el diario aragonés El Heraldo, un testigo vio la matrícula del coche en el cual lo secuestraron. Eso, sumado a las imágenes de las cámaras de seguridad y de tráfico, fue un dato muy importante para localizar a los presuntos autores de los hechos, que han sido detenidos este viernes por el secuestro del bebé de 13 meses en Nuévalos.
Tres detenidos por el rapto del niño de Zaragoza
Los autores materiales del rapto son, presuntamente, el padre y el abuelo de la víctima, pero también han detenido a una tercera persona, amigo de ellos, que ha sido cómplice del rapto. De momento, no han trascendido más datos sobre la triple detención ni sobre donde estaban escondidos y están a la espera de pasar a disposición judicial.