Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado 23 de marzo a dos hombres, ambos de nacionalidad extranjera, uno cubano y otro argentino, por haber, supuestamente, agredido sexualmente a una mujer de 37 años en Terrassa. Ambos tienen antecedentes penales y, aunque fueron arrestados y vinculados policialmente a la agresión sexual, después de ser puestos a disposición del juzgado de guardia de Terrassa, quedaron en libertad. Según denuncia la víctima, que recibe atención del Grup d'Atenció a la Víctima (GAV) de la comisaría de los Mossos de Terrassa, uno de los dos arrestados, y desde una llamada anónima, la amenazó de muerte cuando quedó en libertad al día siguiente de ser detenido. La mujer ha denunciado los hechos y asegura que vive con miedo de ser atacada de nuevo por los dos hombres.
Los hechos se remontan a la noche del 23 de marzo, en un piso de la cocapital del Vallès Occidental, donde acudió, invitada por una amiga suya, a una cena y fiesta. Durante este encuentro, donde estaba la pareja de su amiga y también otro hombre que ella no conocía, fumó marihuana, pero cree que los hombres le dieron un porro adulterado, que la dejó fuera de juego. La mujer asegura en la denuncia que presentó a los Mossos que empezó a notarse extraña, como si se le acabaran las fuerzas. Le daba vueltas la cabeza. Cree que le pusieron alguna droga, porque a partir de ese momento solo recuerda pequeños momentos de la noche.
Detenidos y en libertad los dos agresores
Recuerda cómo dos hombres la agredieron sexualmente, con violencia, con mordiscos, y que incluso su amiga intentó ahogarla. El relato, con mucho más detalle en la denuncia, evidencia una supuesta agresión sexual por parte de los dos hombres, que, según la víctima, duró unas cuatro horas. Ella finalmente pudo ir hasta el baño de la casa donde estaban y llamó por teléfono a unos amigos, que fueron a buscarla y la llevaron a urgencias, y desde allí ya fue a la comisaría de los Mossos d'Esquadra y presentó denuncia.
Los Mossos no tardaron en poder identificar a los dos hombres, con la información facilitada por la mujer, y los detuvieron al día siguiente. Cuando pasaron a disposición judicial, en el juzgado de guardia de Terrassa, sin embargo, quedaron en libertad con cargos, acusados de un delito de agresión sexual. El juez que los escuchó dictó una orden de alejamiento de 500 metros y la prohibición de contactar con la víctima. Pero al menos uno de los dos hombres llamó a la mujer cuando salió de los juzgados y la amenazó de muerte, a pesar de que el juez había prohibido cualquier tipo de contacto. Ponerse en contacto con la víctima, contradiciendo las medidas cautelares dictadas por el juzgado, es un delito, concretamente, de quebrantamiento de condena, y aunque la mujer ha denunciado los hechos, según asegura, los dos hombres, conocidos en el entorno delincuencial de Terrassa, no han vuelto a ser detenidos.
Vive con miedo
La mujer asegura que vive con miedo de ser localizada por los dos hombres y que ha necesitado atención médica. También critica que judicialmente no solo no se le ha ofrecido protección, sino que ha sido revictimizada durante el interrogatorio en sede judicial, cuando fueron detenidos sus dos supuestos agresores. Fuentes policiales han confirmado las dos detenciones y que la investigación está en marcha, y que la mujer ha recibido atención por parte del GAV de la comisaría de Terrassa, tal como marca el protocolo de agresiones sexuales de los Mossos d'Esquadra.