La Policía Nacional ha detenido a dos chicos de 18 y 19 años por grabar a una pareja teniendo sexo en un lavabo de Gandía (Valencia) y difundir el vídeo por redes sociales. Ha sido la chica quien se ha dado cuenta de que los estaban grabando sin su consentimiento y ha podido ver con sus propios ojos cómo habían enviado las imágenes y los vídeos a terceras personas.
Los hechos pasaron la madrugada del domingo, 24 de julio, en el lavabo de una discoteca de la ciudad valenciana de Gandía. Una pareja estaba haciendo sexo encerrados en un baño cuando, de repente, ella se dio cuenta de que había dos chicos asomados y grabándolo todo.
Los dos chicos habían enviado los vídeos de la pareja practicando sexo en Gandía
Fue entonces cuando alertó a los vigilantes de seguridad, que pidieron a los presuntos autores de los hechos que les dejaran ver las fotos y los vídeos que habían hecho. Pudieron comprobar que habían enviado las imágenes a terceras personas y la chica se empezó a poner muy nerviosa.
Inmediatamente, borró el vídeo por miedo a que se siguiera difundiendo. Los vigilantes alertaron a Emergencias 112 y retuvieron a los dos chicos, de 18 y 19 años, hasta que llegaron los agentes de la Policía Nacional.
La Policía Nacional los detiene por un delito contra la intimidad
Los detuvieron como presuntos autores de un delito contra la intimidad. También se quedaron con sus teléfonos para averiguar si lo habían difundido a otras personas por aplicaciones de mensajería instantánea o redes sociales.
Los detenidos son dos chicos de 18 y 19 años sin antecedentes
Los presuntos autores de los hechos, de los cuales no ha trascendido la identidad, son dos amigos de 18 y 19 años que no tienen ningún antecedente policial. Después de pasar a disposición judicial, han quedado en libertad con cargos hasta que se celebre el juicio.
Penas de cárcel por difundir vídeos sexuales sin consentimiento
Las autoridades alertan de que difundir imágenes o grabaciones sin el consentimiento de las partes implicadas es un delito castigado con penas de tres meses a un año de prisión, una multa de seis meses a un año por un delito contra la intimidad.