Los Mossos d'Esquadra investigan la muerte de un hombre de 47 años que ha aparecido, sin vida, este martes, 16 de diciembre, en su casa, en L'Aleixar, en el Baix Camp. Por ahora, todo parece indicar que se trata de un accidente, según ha podido saber ElCaso.com.
Según las primeras informaciones, que deberán confirmarse con la investigación que está llevando a cabo la Unitat d'Investigació de la comisaría de Reus, el hombre habría inhalado monóxido de carbono por una supuesta mala combustión de la caldera, un hecho que le habría acabado provocando la muerte. El hombre ha sido encontrado sin vida en el lavabo de esta vivienda de L'Aleixar, en la calle del Camí dels Masos, en el mismo municipio. El hombre vivía solo. La investigación deberá aclarar todos los detalles de esta triste y trágica noticia, de la que, por ahora, se desconocen más detalles.
Los peligros del monóxido de carbono
El monóxido de carbono es muy peligroso y puede causar fácilmente la muerte de una persona en pocos minutos. El gas no tiene ni color ni olor, por lo que es muy complicado poder detectarlo a tiempo, pero antes de causar la muerte produce varios síntomas que nos pueden servir de alerta. Si estamos respirando monóxido de carbono, podemos notar dolores de cabeza, mareos, náuseas y también dolores en el pecho. El problema de estos síntomas es que son comunes, y podrían deberse a un montón de otras cosas, haciendo que la intoxicación pueda pasar desapercibida. Además, si la víctima está dormida, puede morir sin sufrir ningún efecto.
Este tipo de intoxicaciones suelen aparecer cuando estamos cerca de motores en mal estado, que tienen filtraciones y llenan el aire de este gas, pero el monóxido de carbono puede estar presente siempre que se queme carbón, gasolina, propano o incluso madera. En definitiva, si empezamos a encontrarnos mal cerca de algo que quema, debemos reaccionar rápidamente, saliendo de la sala y ventilándola. Si sospechamos que alguien sufre una intoxicación de este estilo, es importante sacarla al exterior, donde pueda respirar aire fresco, y avisar a los servicios de emergencia, aunque no parezca urgente.