Llega el momento decisivo para Daniel Sancho. Este martes, 9 de abril, empieza en el tribunal de Koh Samui (Tailandia) el juicio por el asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta por el que podría ser condenado a muerte. El proceso, en el cual se prevé que declaren más de 50 testigos entre las dos partes, está previsto que se alargue hasta el 3 de mayo con cuatro sesiones semanales, de martes a viernes. Sin embargo, el juez, según figura al código procesal de Tailandia, podría darlo por finalizado antes si considera que ya tiene información suficiente para resolver el caso.
Daniel Sancho, que lleva en prisión provisional desde que fue detenido días después del crimen en agosto de 2023, contará con un abogado de oficio del país y con un traductor. También dispondrá de su equipo de abogados españoles, con los que ha estado preparando detenidamente el juicio, pero estos no tendrán intervención ni siquiera como testigos por la falta de medios técnicos y la diferencia horaria entre Tailandia y España. Está previsto que la declaración de Sancho ante el tribunal se produzca el 25 de abril y argumente que todo fue un accidente, una posición contraria a la del asesinato premeditado del cual lo acusa la Fiscalía de Tailandia y la familia de Arrieta.
Un asesinato premeditado, según la Fiscalía
El juicio arranca este 9 de abril y durante las primeras dos semanas, hasta el 23 de abril, irán desfilando ante el tribunal los 28 testigos llamados por el fiscal del caso, Jeerawat Sawatdichai, entre los cuales habrá policías o peritos. Como cocausación también estará presente en el juicio, al lado del fiscal, el despacho de abogados Juslaws de Bangkok con el apoyo del bufete español Ospina Abogados, en representación de la familia de Edwin Arrieta. Sus padres, ante la imposibilidad de viajar desde Colombia, no declararán al juicio después de que se haya rechazado su petición de hacerlo por videoconferencia.
Se estima que la fiscalía presenta más de una veintena de pruebas para dar apoyo a las tres acusaciones contra Daniel Sancho: asesinato premeditado, ocultación del cuerpo y destrucción de documentación ajena. Entre estas pruebas hay diversos informes forenses y pruebas de ADN, así como la compra de cuchillos, una sierra, bolsas de basura y productos de limpieza en la isla de Phangan el 1 de agosto, el día antes que se produjera el supuesto asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta.
Un accidente, según Daniel Sancho
Por su parte, a partir del 24 de abril, el abogado tailandés de Daniel Sancho, Aprichat Srinuel, citará a 27 testigos a declarar, entre los cuales el mismo Daniel Sancho, su padre o un psicólogo y un experto forense que se trasladarán expresamente desde España. Su intención es demostrar que la muerte de Edwin Arrieta fue accidental y que el cocinero español en realidad era objeto de amenazas y acoso por parte de la víctima. Entre los argumentos de la defensa, hay supuestas irregularidades durante el proceso, entre los cuales una actuación policial que lo llevó al engaño y a confesar el crimen.
En este sentido, Sancho cambió su primera declaración y, en una vista preliminar en noviembre, negó el asesinato, a pesar de que sí que aceptó el cargo de ocultación del cadáver y reconoció que lo había descuartizado y repartido por varios puntos de la isla, incluido el mar. Una de las principales cartas de la defensa, que contará con el apoyo del bufete español Marcos García-Montes y del Despacho Criminológico Jurídico Bafalgón-Chipirrás, será alegar que no han aparecido todas las partes del cuerpo de Arrieta y que, por lo tanto, la autopsia no pudo determinar las causas exactas de la muerte. Por este motivo, pide la absolución.
Se enfrenta a la pena de muerte
En caso de que el juez decida a favor de los argumentos de la Fiscalía y considere que la muerte de Edwin Arrieta fue un asesinato premeditado, Daniel Sancho podría ser condenado a muerte. Este es uno de los más de 30 delitos para los cuales se contempla la pena capital en el Código Penal tailandés, aunque no acostumbra a ser muy habitual. De hecho, en las últimas dos décadas solo se ha acabado ejecutando a tres personas, la última de las cuales en el año 2018. En la mayoría de los casos en que se dicta esta condena, se acaba conmutando por la cadena perpetua.
Respecto a los otros dos delitos a los cuales se enfrenta Daniel Sancho, el de ocultación del cuerpo y la destrucción de documentación, podría ser condenado a penas máximas de uno y cinco años respectivamente. Además, la familia de Edwin Arrieta reclama una indemnización por responsabilidad civil de 410.000 euros. En caso de ser condenado a muerte, Sancho nunca podrá volver a España. La opción de los ciudadanos españoles de pedir el traslado a una prisión española solo se puede solicitar una vez cumplidos cuatro años de la condena y siempre que esta no sea la pena capital.
Gran expectación mediática
El juicio a Daniel Sancho mantiene la gran expectación mediática que ha generado el caso desde su detención el pasado mes de agosto por ser el hijo del conocido actor Rodolfo Sancho. Las autoridades tailandesas han permitido el acceso a los medios de comunicación, muchos de ellos desplazados desde España para la ocasión después de pedir un permiso especial a la embajada tailandesa de Madrid. Eso sí, los periodistas no podrán grabar imágenes ni audios de lo que suceda dentro de la sala, como tampoco tomar notas. Además, como el resto de implicados en el juicio, tendrán que seguir unas normas muy estrictas marcadas por la cultura budista del país, como ir descalzos, con los hombros cubiertos y pantalones largos. Además, está prohibido cruzar las piernas y las manos tendrán que estar obligatoriamente sobre ellas.