Doble denuncia para un hombre de Valencia que conducía en patinete eléctrico por la autovía V-31 borracho y que se estampó contra un coche ocupado por cinco personas. Los agentes procedieron a realizar una prueba de alcoholemia en el temerario conductor, que obtuvo un sorprendente e irresponsable resultado: el hombre tenía 1,02 miligramos de alcohol por litro de sangre, una cifra que cuadruplica la tasa de alcoholemia máxima permitida.
Las autoridades, a pesar de estar aliviadas, todavía no se explican como un accidente que podría haber acabado en tragedia solo ha provocado daños materiales y un susto en todos los implicados. Los hechos sucedieron la semana pasada, a las diez y media de la noche del 29 de mayo, a la altura del kilómetro trece de la autovía de entrada en Valencia, la V-31, popularmente conocida como "pista de Silla". Al tratarse de una autovía, los vehículos de movilidad personales, como son los patinetes eléctricos, tienen prohibido circular.
El hombre sufrió una colisión por embestida con un vehículo
Hacia las diez y media de la noche, los cinco ocupantes de un vehículo que circulaba por la pista de Silla, la autovía de entrada en la capital valenciana, sufrían uno sale de grandes dimensiones al ver como un hombre se estampaba contra su coche. El hombre circulaba de noche por el arcén de la autovía montado en un patinete eléctrico; estos vehículos, a menos que estén trucados, llegan a una velocidad máxima de 25 kilómetros por hora, mientras que la velocidad máxima permitida de la autovía por donde circulaba era de 80 kilómetros por hora. Afortunadamente, la colisión lateral no provocó víctimas mortales ni heridos, y los únicos daños que se derivaron del accidente fueron materiales.
Al llegar la Guardia Civil en el lugar de los hechos, procedieron a realizar una prueba de alcoholemia al temerario conductor del patinete eléctrico. El resultado de esta prueba sorprendió incluso a los agentes: el hombre había estado conduciendo en patinete eléctrico por la autovía con 1,02 miligramos de alcohol por litro de sangre, una tasa que multiplica por cuatro la máxima permitida. Con esta cifra, la Guardia Civil de Tráfico interpuso dos denuncias contra el hombre: una por conducir por la autovía con un vehículo no autorizado, y otra por conducir con una tasa de alcohol cuatro veces superior a la permitida.
Los patinetes eléctricos también tienen normas de seguridad vial
Los patinetes eléctricos son uno de los medios de transporte que más se han popularizado en los últimos años, y que cuentan con su propia regulación a fin de que la conducción sea segura para todos los usuarios y peatones. Por ejemplo, los conductores de patinetes eléctricos tienen prohibido circular con más de una persona sobre el vehículo, conducir por vías interurbanas (como autovías o carreteras), utilizar las aceras y superar la limitación de 25 kilómetros por hora, entre otras normas. Además, en el caso concreto de Valencia, se obliga en los conductores de patinetes eléctricos a usar un casco que los proteja de posibles caídas.