Los Mossos d'Esquadra del Área Regional de Tráfico (ARTE) de Girona han detenido este lunes, a las once y media del mediodía, el conductor de un camión que transportaba mercancía peligrosa y que se había puesto al volante en un evidente estado de embriaguez, poniendo en peligro el resto de vehículos que circulaban por la AP-7.

Varios conductores de otros coches avisaron al teléfono de emergencias 112 que habían detectado un camión que circulaba de manera muy errática por la autovía, haciendo eses y disminuyendo y aumentando la velocidad de manera imprevisible. Los agentes desplazados hasta el lugar le interceptaron en el punto kilométrico 47,5 a la altura de Vilademuls (Pla de l'Estany) dirección Girona, y lo detuvieron por un delito contra la seguridad vial.

Sextuplicaba la tasa de alcoholemia

Cuando lo interceptaron, el camión estaba circulando por el arcén. Antes de poder pararlo, el camión volvió a la carretera, haciendo eses e invadiendo todos los carriles. El conductor, un hombre de 46 años, presentaba claros síntomas de ir muy bebido. Por eso le sometieron a una prueba de alcoholemia que dio positivo con 0,93 mg/litro, una tasa muy por encima de la máxima permitida para los conductores profesionales, de 0,15 mg/litro.

Según el Diario de Girona, el conductor estaba a cargo de mercancía de carácter peligroso que transportaba desde Italia hasta Castellolí, en Anoia. Después de comprobar que, en efecto, estaba circulando ebrio y de pedirle el permiso de conducir, lo detuvieron acusado de un delito contra la seguridad vial por ir bajo los efectos de bebidas alcohólicas. Por otra parte, los Mossos se pusieron en contacto con la empresa de transportistas que gestiona los camiones que hacen esta ruta, para que enviaran a otro trabajador para sustituir al detenido. El hombre fue trasladado a comisaría, a la espera de poder ser interrogado.