Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para identificar un cadáver que ha aparecido, en avanzado estado de descomposición, a la zona de la Font del Quinto, en el río Ebro en su paso por el pueblo de Campredó, en Tortosa, en el Baix Ebre (Tarragona). La autopsia tendrá que dar más detalles a los investigadores de la policía catalana y también confirmar si se trata de un hombre o una mujer, un hecho que ahora mismo, por el estado del cuerpo, ha sido imposible aclarar. Tampoco se puede saber si el cuerpo presenta signos de criminalidad. Externamente, no se han detectado, pero hará falta que se haga la extracción del cadáver del agua y se analice en fondo, según han explicado agentes de la policía catalana a ElCaso.com.

El aviso se ha recibido en torno a la una del mediodía y hasta el punto se han desplegado agentes de la Guardia Civil, del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y también de los Bomberos de la Generalitat, además de los Mossos d'Esquadra, con agentes de la Policía Marítima. Cuando se ha confirmado que la persona estaba muerta, la mayoría de los efectivos se han retirado y se ha hecho la retirada del cuerpo del río.

Las pruebas forenses serán claves para determinar quién es la persona que ha aparecido al río y, también, cómo murió. Todas las líneas de investigación están, ahora mismo, abiertas. Por el estado con el cual se encuentra el cadáver, hace pensar que ha estado bajo el agua durante varios días y que ahora, cuando se ha hinchado -es un proceso habitual-, ha subido a la superficie y ha sido visto. La zona donde ha aparecido el cadáver es muy transitada y dónde decenas de personas entrenan remo cada tarde, hecho que hace pensar que hacía pocas horas que había salido en superficies.

Identificar el cadáver

Cuando pueda ser identificado, los Mossos sabrán de quién se trata y si es uno de los dos hombres de nacionalidad moldava que hace tres semanas desapareció a la zona, después de una fiesta. El fin de semana de Pascua desaparecieron de manera misteriosa. Uno de ellos se marchó con 30.000 euros y desde aquel día no se ha sabido nada más. La policía catalana también está repasando las otras desapariciones activas en la zona de las Terres de l'Ebre y de Tortosa en concreto por si puede haber más perfiles parecidos.