Seguro que, cuando te salen recomendaciones de seguridad en el teléfono o cuando te estás creando una cuenta y te pide una contraseña complicada con números, letras en mayúscula, minúscula y caracteres especiales, has pensado "¿pero quién tendrá interés en hackearme el correo a mí?". Es normal que pienses de esta manera, pero aunque parezca mentira, muchos estafadores pagarían por tener tu información personal y poder acceder a tus cuentas por un motivo muy sencillo: pueden ganar dinero gracias a ellas.
En primer lugar, es importante explicar qué significa que tengan nuestros datos personales. Es toda aquella información que sirva para identificarnos, tanto la que es pública como la más privada. Algunos datos personales, por ejemplo, son nuestro nombre completo, medios de contacto, números de las tarjetas y las cuentas del banco, datos sobre tu salud o el DNI, entre otros. Algunos de estos, como el nombre, pueden parecer irrelevantes, pero son muy importantes para los ladrones.
Pueden ganar dinero solo con nuestro nombre
El principal interés que tienen los estafadores es entrar directamente en nuestro banco. Con las tarjetas de crédito o el usuario y contraseña de nuestra banca online pueden retirar dinero, enviarlo a otras cuentas o, en caso de que ya nos hayan dejado sin un euro en el bolsillo, pedir un préstamo que aún nos hundirá más. También pueden estar interesados en nuestra identidad, para así poder hacer lo que quieran sin dejar rastro y que nosotros les sirvamos de cortina de humo. Por ejemplo, para enviar correos phishing vinculados a estafas y que salgamos nosotros como autores del mensaje.
Otra estrategia es robarnos la información, no porque les sirva de algo, sino para poder pedirnos que paguemos si queremos recuperarla, ya que podemos tener muchas cosas de valor simbólico que no queremos perder. También hay casos donde los ciberdelincuentes venden los datos en el mercado negro, porque a ellos no les sirven, pero quizás a alguien más sí. Hay muchos motivos por los que los delincuentes podrían querer estafarnos y quedarse con nuestros datos, por lo tanto, la próxima vez que nos pidan crear una contraseña elaborada, lo mejor es hacer caso para evitar que nos estafen.