Cada día los Mossos d'Esquadra desmontan alguna plantación de marihuana. Hoy ha tocado hacerlo en Susqueda, en la comarca de la Selva (Girona), donde se han podido desmantelar 7.800 plantas y detener a cuatro hombres, de entre 19 y 46 años, de nacionalidad albanesa, como presuntos autores de un delito contra la salud pública.
A primera hora de la mañana agentes del Grupo Especial de Intervención (GEI) de los Mossos se ha desplegado, con uniformidad de camuflaje, en la zona donde se creía que los cuatro hombres se habían instalado y habían montado la plantación.
Vivían como animales en medio del bosque
Los operadores del GEI han sido los primeros a inspeccionar la zona dada la compleja orografía del terreno, que impide acceder con vehículos motorizados y obliga a realizar la aproximación al cultivo a pie superando zonas de gran desnivel.
Cuando han podido detener a los cuatro jardineros y han asegurado la zona, los agentes de la Unidad de Investigación de la comisaría de Santa Coloma de Farners han accedido a la plantación. Los cuatro hombres vivían en la plantación en una improvisada tienda de campaña. Fuentes de la investigación han explicado a ElCaso.com que los cuatro vivían como animales escondidos en el bosque y sobreviviendo como podían.
Escondidos en una zona boscosa de difícil acceso
La investigación se remonta al principio de mayo, cuando gracias al Ayuntamiento de Susqueda y la colaboración ciudadana, se tuvo conocimiento de la posible existencia de una plantación de marihuana situada en una zona boscosa y de difícil acceso conocida como el Torrent de Sant Martí de la localidad.
Los agentes durante la inspección de la zona han localizado 7.800 plantas de marihuana, en diferentes estados de crecimiento, y varios refugios precarios que utilizaban los detenidos para pernoctar y garantizar la vigilancia de manera permanente. Los cuatro detenidos pasarán a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Santa Coloma de Farners.