Los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre de 30 años muy espabilado que se aprovechaba de su trabajo como técnico de datáfonos para hacerse las devoluciones de las compras que hacía con su tarjeta en varias tiendas de Barcelona. De momento, hay medio centenar de comercios afectados, pero la investigación abierta por la Unidad de Investigación del distrito de Sarrià-Sant Gervasi continúa en marcha para confirmar que no haya más. El hombre -cuya nacionalidad la policía catalana no ha querido comunicar- se reembolsó 3.500 euros a sí mismo antes de ser pillado por un error que cometió a la hora de hacer una de estas devoluciones fraudulentas.

Y es que uno de los comercios afectados se dio cuenta de que constaba una devolución de productos fuera de su horario de apertura, hecho que encendió todas las alarmas y decidieron contactar con las autoridades. Los Mossos pusieron en marcha una investigación, detectando el mismo patrón en una cincuentena de tiendas y comercios de toda Barcelona, con el nexo común de que el dinero se devolvía siempre a la misma cuenta bancaria. Estirando de este hilo, pudieron identificar al titular, que fue arrestado el pasado 18 de febrero acusado de 97 delitos de estafas bancarias con tarjetas.

¿Cómo hacía estas devoluciones?

El hombre trabajaba para una empresa subcontratada que ofrece servicio de reparación de datáfonos a diferentes entidades bancarias. De esta manera, tenía fácil acceso a los aparatos de TPV y se aprovechó de sus conocimientos sobre el funcionamiento de estas máquinas para hacerse las devoluciones desde casa. Para eso solo necesitaba pedir el ticket que genera el datáfono una vez efectuada una compra con tarjeta. En este papel hay un determinado código que el detenido introducía en el datáfono que tenía en casa, autorizándose a sí mismo la devolución del importe de algunos de los productos por pequeñas cantidades para no levantar sospechas.

Pero como la tarjeta y la cuenta bancaria donde iba a parar este dinero estaban a su nombre, una vez se puso en marcha la investigación no fue muy difícil seguir este rastro e identificarlo. El técnico detenido no tenía antecedentes policiales y pasó a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia el 19 de febrero.