El Camp de Tarragona se ha convertido por su clima y por su ubicación en una de las regiones ideales para montar una plantación de marihuana. Por este motivo, muchos narcotraficantes se han instalado para cultivar esta droga y después exportarla en camiones hacia el resto de Europa. En uno de estos transportes realizado este viernes, las autoridades de Bulgaria han pillado un camión con matrícula búlgara procedente de Tarragona que transportaba más de 100 kilos de marihuana escondida en el interior del vehículo. El camión acababa de entrar en Bulgaria cruzando la frontera desde Rumania cuando los agentes aduaneros lo hicieron parar para inspeccionar la carga.

Según explicaron los dos conductores, venían de Tarragona, donde habían cargado unas piezas de coches que tenían que transportar hasta Hungría. En este país habían hecho la descarga correspondiente y siguieron su camino hasta Bulgaria para volver a casa sin ningún tipo de carga en el camión. Al registrar el vehículo pesado, sin embargo, los agentes policiales vieron que los conductores no estaban diciendo la verdad. En un escondite bajo el suelo del camión se encontraron 95 bolsas de plástico cerradas al vacío llenas de cannabis. En total había 106,232 kilos de inflorescencias de cannabis, según apuntan medios de aquel país.

Un camión lleno de marihuana accidentado en la AP-7

Si este camión lleno de marihuana pudo llegar hasta Bulgaria, no lo pudo hacer otro que iba hasta Rumania y que se accidentó en la AP-7 este miércoles. El vehículo venía de Andalucía cargado de pepinillos y calabacines cuando acabó volcado en medio de la autopista a su paso por Tarragona. Al inspeccionar la carga, los Mossos descubrieron que además de las verduras, también transportaban 190 kilos de marihuana dentro de bolsas de plástico. El conductor, después de ser trasladado al Hospital de Santa Tecla para recibir atención médica, huyó y no se la ha podido detener.