Este sábado por la noche, los vecinos de un edificio de Vilanova i la Geltrú (Barcelona) se llevaron un susto de muerte cuando, poco antes de las nueve, el techo del baño de uno de los pisos se hundió. Los Bombers de la Generalitat enviaron cinco dotaciones terrestres con efectivos del Grup Operatiu de Suport (GROS) con puntales. Todos los inquilinos del bloque, de dos niveles y planta baja, con un total de seis pisos, fueron evacuados; afortunadamente, ninguna persona resultó herida y, a estas alturas, ya han podido volver a sus domicilios.

Apuntalan todos los pisos por precaución

Los Bombers de la Generalitat hicieron una primera revisión del techo del cuarto de baño afectado, situado en el segundo piso, arriba de todo. Mientras tanto comunicaron a todos los vecinos que tenían que abandonar su casa por precaución y, junto con el arquitecto municipal, decidieron que la manera de proceder más segura sería apuntalar los techos de los lavabos de todos los pisos. La incidencia se pudo resolver en solo unas horas, y ninguno de los vecinos tuvo que pasar la noche fuera de casa.

Paralelamente a esta actuación, los Bombers de la Generalitat fueron requeridos en Berga por la caída de un andamio de obra de unos cinco metros de alto y diez de longitud, que se tumbó sobre una línea eléctrica. El aviso llegó poco antes de las diez de la noche, y se desplazaron hasta allí cuatro dotaciones que aseguraron el andamio y cortaron la calle a la espera de la llegada de la empresa responsable de la obra que, según han informado desde el cuerpo de Bombers en su cuenta de X, será quien se hará cargo de mover el andamio, que no supone peligro para las personas que viven en los pisos de los alrededores.