El robo de un teléfono móvil en Torredembarra ha acabado de una de las peores formas posibles, con la víctima detenida y una persona inocente con la nariz rota. Los hechos se produjeron la madrugada de Fin de Año durante una fiesta para dar la bienvenida al año 2024 que se celebraba en el pabellón Sant Jordi, en la calle Rosella de este municipio del Tarragonès. Hacia las cuatro de la madrugada, una pelea entre dos chicos en el interior del recinto provocó que los vigilantes de seguridad del evento los echaran y alertaran de los hechos a la Policía Local, ya que uno de los implicados presentaba varias heridas y tenía la cara llena de sangre.
Cuando los agentes municipales llegaron al pabellón, sin embargo, la víctima de la agresión ya no estaba. Se había ido por su propio pie hasta el hospital Joan XIII de Tarragona para recibir atención médica, tal como apunta el Diari de Tarragona. El agresor, en cambio, todavía estaba y lo pudieron identificar, aunque lo dejaron marcharse a casa. La Policía Local, a pesar de ello, abrió una investigación sobre los hechos y, después de recopilar diversa información interrogando a la víctima y a diversos testigos de los hechos, el pasado 6 de enero, día de Reyes, lo detuvieron como presunto autor de un delito de lesiones acusado de darle a la víctima una patada en la cara.
Le habían robado el móvil
El detenido fue trasladado a las dependencias policiales, donde los agentes le tomaron declaración. El chico justificó la agresión asegurando que le habían robado el teléfono móvil. Fruto de eso, se enfrentó con otro joven, momento en el cual la víctima intentó mediar para detener el enfrentamiento. Los dos empezaron a forcejear, la víctima cayó al suelo y el agresor le dio la patada a la cara. El golpe le provocó fracturas en la nariz y en el pómulo, por las cuales ha necesitado intervención quirúrgica. Por su parte, el detenido pasó a manos de los Mossos d'Esquadra antes de ser puesto a disposición judicial.