Dos vecinos de Lleida iban a robar cableado telefónico en Aragón valorado en miles de euros. La Guardia Civil investiga dos hombres, de 30 y 54 años, por un robo de cableado telefónico cometido en la comarca aragonesa del Somontano de Barbastro, en Huesca. Los dos individuos, supuestamente, fueron el pasado martes 24 de septiembre de madrugada a la zona y fue la primera vez que los pillaron durante un control de tráfico en Abiego. Los agentes pararon la furgoneta con los dos ocupantes y, ante el nerviosismo que presentaban ambos, se los hizo abrir la parte posterior del vehículo.

Los hombres, siguiendo las instrucciones de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, abrieron la parte posterior de la furgoneta y allí se descubrió el pastel: numerosos rollos de cable telefónico, entre otros objetos como una escalera plegable o una cizalla, que fueron intervenidos. Todo apuntaba a que había sido sustraído y, además, los ocupantes del vehículo no pudieron acreditar la procedencia, por lo que los efectivos del Instituto Armado iniciaron una investigación con el fin de averiguar si había habido algún corte de cable en la zona. Y así fue: habían cortado el cable telefónico entre Albereuela de Laliena y Bierge, y las evidencias apuntaban hacia el material encontrado.

Más de 6.000 euros en cable telefónico

Además, todas las piezas empezaron a encajar cuándo la compañía telefónica denunció unos días más tarde el robo del cableado telefónico y valoró los daños causados por la sustracción entre Albereuela de Laliena y Bierge en unos 6.000 euros. Asimismo, la Guardia Civil también comprobó que las herramientas encontradas en el interior de la furgoneta habían sido robadas de una empresa de Lleida. Por todo ello, el pasado jueves 24 de octubre investigaron a los dos hombres como supuestos autores de un delito de robo con fuerza. A uno de ellos también lo investigan por un delito contra la seguridad vial por no haber obtenido nunca el permiso de conducir. Las diligencias correspondientes han sido entregadas al Juzgado de Instrucción número 1 de Barbastro.