Los ataques para robar relojes de lujo en las calles ya no son exclusivos de Barcelona. Ahora se trasladan a diferentes puntos de Catalunya y el último ha sucedido en la ciudad de Tarragona. Según ha podido saber ElCaso.com, un hombre ha sido abordado este miércoles por la tarde por tres jóvenes de origen magrebí y le han sustraído un reloj marca Omega valorado en 7.000 euros. El atraco, tal y como ha explicado la víctima a la policía, ha sido rodeado de una agresión previa y posterior hasta que le han conseguido arrancar de la muñeca el objeto.
Los hechos han tenido lugar, según han confirmado fuentes policiales a este medio, poco después de las cinco de la tarde de este miércoles. De hecho, los Mossos d'Esquadra han recibido la alerta de un robo con violencia en la vía pública, en la ciudad de Tarragona, hacia las 17.15 horas. La víctima ha explicado que los tres chicos lo han rodeado y abordado. Sin embargo, lo que no tienen claro todavía los investigadores es si el hombre se ha caído al suelo o lo han empujado. Este segundo caso es el que el agredido ha explicado, además que después lo habrían pateado una vez se encontraba indefenso en el suelo. La agresión ha venido motivada por el valor del reloj que han logrado sustraer. La policía catalana está pendiente de denuncia y realiza las indagaciones pertinentes para poder identificar a los presuntos autores de los hechos.
Oleada de robos de relojes en Barcelona
El mes pasado, septiembre, los ladrones de relojes de Barcelona protagonizaron una oleada de robos de este tipo en el centro de la ciudad, la mayoría en Ciutat Vella. Los Mossos d'Esquadra detuvieron a ocho delincuentes en menos de 24 horas. Entre otros, seis hombres que participaron en el intento de robo de un reloj valorado en 40.000 euros a un turista norteamericano cuando intentaba acceder a un apartamento turístico, tal como adelantó ElCaso.com. En este caso tres personas, jóvenes y de origen magrebí, lo asaltaron cogiéndolo por el brazo y por la espalda para intentar arrancarle el reloj que portaba. Los ocho arrestados, de entre 19 y 30 años, formaban parte de un grupo organizado que utilizaba estas técnicas agresivas para hacerse con los relojes de lujo en la capital catalana.