Parecería lógico pensar que la baja de un coche en los registros oficiales de la Dirección General de Tráfico (DGT) solo la puede hacer su propietario, pero no siempre es así. Existen varios motivos por los que el vehículo puede quedar directamente fuera del parque automovilístico legal español sin ninguna autorización. Precisamente por aquellas en las que intervienen razones de seguridad y cuestiones medioambientales que, por otra parte, permiten al organismo renovar un parque de vehículos envejecido, el más longevo de Europa, además. La edad media en España es de 13,45 años, mientras que en el continente es de 11,5.

Situaciones determinadas, introducidas por un polémico Real Decreto de 2021

La DGT puede actuar de oficio para dar de baja los vehículos de forma definitiva en determinados casos. Así lo ampara el Real Decreto 265/2021 de 13 de abril, sobre los vehículos al final de su vida útil y por el que se modifica el Reglamento General de Vehículos aprobado por el Real Decreto 2822/1998, de 23 de diciembre. Ambos promulgados por el Boletín Oficial del Estado (BOE), con el visto bueno, el de 2021, del Ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática. Pero, ¿qué provocará que nos podamos encontrar en esta situación?

El primero de los casos es para aquellos vehículos muy antiguos que están en una situación administrativa muy determinada. Es decir, los que no hayan contratado un seguro obligatorio los últimos diez años o que no hayan pasado la ITV en una década. No obstante, en la ley se estipula que "esta baja definitiva de oficio, en cualquier caso, no impide que si el vehículo cumple a posteriori las condiciones para poder volver a obtener la autorización administrativa por circular, pueda ser rehabilitado". Un caso en el que la burocracia hará que el propietario pueda volver a tener licencia para utilizar legalmente su coche por las carreteras españolas.

Todo esto permite a la DGT mantener un poder mayor sobre los propietarios de vehículos en toda España. De hecho, esta nueva norma cambió, indirectamente, las condiciones de las bajas temporales de los coches: ahora solo queda limitada a un año. Así, pues, cuidado con no pasar la ITV o no tener el seguro obligatorio al día, porque la Jefatura de Tráfico está detrás de estas infracciones y ahora la baja será inmediata.