El 'Breaking Bad' catalán continúa, aunque la serie estadounidense emitiera el último capítulo años atrás. En esta nueva entrega, los Mossos d'Esquadra han actuado en un nuevo escenario: una masía típica catalana que fecha de entre los siglos XVI y XVII. La masía, ubicado en el municipio de Fogars de la Selva (Selva) e incluido en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Catalunya por su interés arquitectónico, escondía en el interior de sus centenarios muros una gran plantación de marihuana, así como elevadas cantidades de cogollos envasados y preparados para vender al mercado negro. Los habitantes de la masía, que lo habían habilitado al detalle con el fin de cultivar las plantas, presuntamente también han cometido un delito de fraude eléctrico, el cual llega a superar los 100.000 euros. Los agentes de la policía de la Generalitat han detenido los dos inquilinos de la masía, dos hombres de 24 y 34 años, que en estos momentos se encuentran en la prisión bajo la orden del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Arenys de Mar (Marisma).

Los Mossos d'Esquadra encontraron más de 1.500 plantas de marihuana en el interior de la masía

Los agentes de la policía catalana entraron y registraron la masía el pasado martes, 9 de agosto, concluyendo así una investigación que había empezado dos meses atrás, a principios de junio, a raíz de las sospechas que en la masía de interés arquitectónico se escondía una plantación de marihuana interior. Así pues, el martes pasado efectivos de los Mossos de la comisaría de Santa Coloma de Farners, junto con agentes del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), entraron en la masía. En el interior, encontraron un cultivo de marihuana de grandes dimensiones, con un total de 1.509 plantas de marihuana distribuidas por las diferentes estancias de la masía; también encontraron 1.350 gramos de cogollos de marihuana envasados y preparados para venderse de forma ilícita. La masía estaba totalmente equipada a fin de que las plantas, y el consiguiente negocio ilegal, creciera sin problema.

La centenaria de la masía había estado totalmente equipada con la infraestructura necesaria para el cultivo de las plantas de marihuana de interior, como foco, transformadores, ventiladores, aires acondicionados, filtros, extractores, fertilizantes, herramientas de jardín y sistemas de riego.

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Las más de 1.500 plantas estaban distribuidas a diferentes estancias de la masía centenaria. / Foto: Mossos d'Esquadra

La conexión eléctrica de la masía era fraudulenta: miles de euros estafados

Los dos inquilinos de la masía también habían alterado la conexión eléctrica de la finca, con una doble acometida que habían manipulado y conectado directamente en la red eléctrica general, de manera que los individuos podían cultivar las plantas sin tener que sufrir por la factura eléctrica. De hecho, se han ahorrado 109.000 euros, que es la cantidad a la cual asciende la energía eléctrica no facturada.

El juez ha decretado prisión para los dos detenidos, que no tenían antecedentes

Los Mossos d'Esquadra, después de llevar a cabo el cacheo de la masía, procedieron a detener a los dos inquilinos de esta, dos hombres de 24 y 34 años de quienes no constaban antecedentes penales. Los agentes acusan a los detenidos de un delito contra la salud pública, así como de un delito de defraudación de fluido eléctrico. Después de pasar a disposición judicial, el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Arenys de Mar (Marisma) me ha decretado el ingreso en la prisión.