La previsión de mal tiempo para los próximos días ha hecho que la búsqueda de José Antonio Martínez quede parada por segunda vez en quince días. El montañero catalán, de 45 años, desapareció el pasado 29 de diciembre mientras hacía una ruta por la sierra de Béjar, en Salamanca, y desde entonces que no se sabe nada de él.
El pasado 7 de enero se suspendía la investigación por primera vez, también a causa de las malas condiciones meteorológicas, y según la familia del excursionista, vecino de las Franqueses del Vallès (Vallès Oriental), no se preveía retomarlas antes de febrero. El entorno de José Antonio denunció por las redes sociales esta decisión, así como el hecho de que el dispositivo de búsqueda carecía de efectivos suficientes para encontrarlo pronto.
Suspenden la búsqueda una semana después
El pasado 10 de enero se reanudaba la búsqueda, "con un amplio dispositivo y un operativo de personas y medios" con más agentes de Protección Civil y un helicóptero que sobrevolara el territorio. No obstante, este segundo intento por encontrar al montañero ha tenido que detenerse solo seis días después a causa del mal tiempo. Fuentes de la subdelegación del Gobierno en Salamanca han explicado a EFE que no pueden subir hasta la cima del Calvitero, donde se perdió la pista a José Antonio. "Parece que durante unos cuantos días seguirá siendo así", decían en referencia a las condiciones adversas que les impiden continuar con su trabajo.
Por su parte, los agentes de Protección Civil que participaban en el dispositivo pararon su tarea ya el sábado. "No podemos poner en peligro los equipos", aseguraban desde el 112 a la citada agencia. No obstante, los especialistas del Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña de la Guardia Civil (GREIM) está evaluando las condiciones cada día, aunque apuntan que "la semana que viene no será buena meteorológicamente".
Más de dos semanas sin rastro de José Antonio
José Antonio desapareció mientras hacía una ruta a pie por la sierra de Béjar, en concreto por el camino que une la plataforma del Travieso con la cima del Calvitero, situado a más de 2.000 metros de altura. El desaparecido y su mujer habían decidido pasar las fiestas de Navidad en el pueblo de ella, Ceclavín, situado en Cáceres, y el día 29 José Antonio decidió salir solo a hacer la excursión.
Aunque todavía no se ha encontrado ningún rastro de él, los equipos de rescate están trabajando con la hipótesis que el montañero nunca ha salido de la sierra, y que seguramente se había refugiado en algún lugar de la montaña.