Una joven se ha hecho viral tras explicar que clonó a su gata, Chai, después de que muriese a los cinco años de forma trágica, el pasado 2017. Mediante un proceso genético, ahora muestra en redes sociales al clon de su mascota, un nuevo felino llamado Belle, que ella cuenta que es totalmente diferente a Chai, pese a que el aspecto es, si no exacto, sorprendentemente similar. Se trata de una decisión muy controvertida que le ha garantizado mensajes de odio cada día, aunque ella la considera una de sus mejores elecciones.
Clona a su gato muerto por 23.000 euros
Chai murió enferma a los cinco años y, mientras pasaba el duelo, la dueña, llamada Kelly Anderson, decidió gastarse 22.780 euros en un proceso de clonación "por puro amor" hacia su recién fallecida mascota. La gata murió en marzo de 2017 y Anderson, en declaraciones a The Sun, aseguraba que "no pudo dormir esa noche" y el cielo se le abrió cuando habló con su compañero de piso, que es auxiliar de veterinaria, de la posibilidad de clonar al animal.
Tras investigar a varias empresas, contactó con una de ellas tras tomar la decisión casi instantáneamente, y el proceso empezó. El primer paso fue que el veterinario trabajase con la empresa para obtener una biopsia de la piel de Chai. El proceso acabó durando cuatro años, hasta que su sueño se cumplió y Belle llegó a su vida, con el mismo aspecto de Chai, aunque completamente diferente, tal y como confesaba ella misma al medio citado.
No se parece en nada a Chai: "Es un gato totalmente diferente"
Las empresas que se dedican a la clonación de animales domésticos garantizan un resultado físico que muestre un aspecto similar o incluso idéntico, aunque aseguran que cada mascota clonada desarrollará una personalidad propia que no depende del proceso genético, sino de los factores externos que le rodeen y cómo le afectan. Y el ejemplo de Belle es perfecto porque su dueña asegura que, efectivamente, son iguales por fuera, pero la nueva es "un gato totalmente diferente".
"Tienen algunos rasgos de la personalidad que son un poco similares. Las dos son muy audaces y atrevidas, aunque eso podría justificarse con la raza. Pero Belle es una gata totalmente nueva", detallaba Anderson. Dueña de tres gatos más, la mujer explica que, al ser más pequeña, "quiere jugar todo el tiempo y es escandalosa como cualquier gato de seis meses". Aun así, afirma que es muy cariñosa, curiosa y muy alocada, que no tiene miedo a nada y le encanta explorar.
De hecho, la pasea por fuera de casa o incluso la lleva a los bares, porque "le gusta conocer a otros animales". Además, explica que Belle ha cogido más peso y es "más suave y peluda" que Chai, que estaba muy enferma antes de morir, aunque las fotos muestran a dos gatos prácticamente iguales. Su caso se ha viralizado y convertido en polémica, ya que muchas personas se han posicionado en contra de la clonación y abanderan la adopción de una mascota. Otros comparan directamente la clonación con una "fábrica de cachorros de alta tecnología".
El debate de la clonación y los riesgos para los refugios de adopción
Además de estos comentarios, Anderson explica que recibe docenas de mensajes de odio en TikTok cada día. "Algunos se quejan de la ética, pero hay quien afirma que estoy usando un gato clonado para ganar dinero en las redes sociales", relata la mujer en la entrevista, donde también rechaza que eso sea verdad y asegura que la única razón por la que clonó a Chai es porque la quería muchísimo. Pero no a todo el mundo le sirve este argumento, e incluso la organización PETA -Personas por el Trato Ético de los Animales- se ha hecho eco del asunto, recriminándole que su influencia afecta a los refugios de animales y temen una tendencia de personas clonando a sus mascotas.
"Tu promoción afecta directa y negativamente la vida de otros gatos, aquellos que están metidos en refugios esperando una familia", le decía PETA en un mensaje que ella contestó asegurando que estaba "muy fuera de lugar y los datos muy mal informados". Según ella, que ha sido casa de acogida de más de cien gatos y siempre ha adoptado, perder a Chai fue devastador en su vida: “Había algo especial y diferente en Chai. Realmente no lo sé, no puedo expresarlo con palabras. Nunca he tenido una mascota como ella. Y quería seguir teniendo una parte de ella”, remataba Anderson.