Este fin de semana, los Mossos d'Esquadra frustraron el intento de ocupación de una vivienda de la calle de Oviedo de Girona. En concreto, el domingo 13 de octubre a media mañana, los vecinos de un bloque de pisos llamaron a la policía catalana alertando de que había varias personas que intentaban acceder a uno de los domicilios por la fuerza y los habían amenazado. Cuando llegó la patrulla vieron a cuatro hombres que salían del edificio cargando una bolsa con ropa, una cerradura, dos bombines y un taladro con batería, todo material susceptible de haber sido utilizado para abrir la puerta y cambiar la cerradura.
Los cuatro quedaron identificados, así como un quinto hombre que localizaron en la calle y que también había intentado forzar la puerta. Al inspeccionar el piso damnificado, encontraron la puerta desencajada del marco y la madera rota, pero no había nadie dentro.
Volvieron y obstruyeron la puerta para evitar ser detenidos
Solo unas horas más tarde, los Mossos volvieron a recibir llamadas de los mismos vecinos que decían que los hombres que habían identificado antes habían vuelto y habían entrado dentro del piso. Para evitar que los echaran, cerraron la puerta, que estaba totalmente rota, y seis hombres se habían atrincherado en el interior.
Para hacerles salir, se requirió la presencia de los agentes del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) y de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Girona. Los agentes consiguieron que se marcharan del piso, pero uno se enfrentó a ellos, por lo que quedó detenido por un delito de resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad, así como por daños al inmueble ocupado. Los otros cinco fueron denunciados por un delito de ocupación. A raíz de la actuación, los Mossos averiguaron que el objetivo de los ocupas era cambiar la cerradura y revender las llaves a familias vulnerables y lucrarse a costa de ellos.