Un nuevo tiroteo en Estados Unidos ha acabado con cinco víctimas mortales y ha dejado a seis heridos más de diversa consideración. Los hechos han tenido lugar este lunes hacia las ocho y media de la mañana hora local en una entidad bancaria de la ciudad de Louisville, en el estado de Kentucky, cuando un hombre ha entrado con un arma de fuego y ha empezado a disparar sin miramientos contra todas las personas que había en el interior. Todo parece indicar que su intención no era cometer un atraco, sino que simplemente quería poner fin a la vida de las personas. Según han informado desde el departamento de policía local, el asaltante ha podido ser neutralizado y también ha muerto.
El tiroteo ha tenido lugar en el Old National Bank, al lado del Slugger Field, el estadio de béisbol del equipo local, en una zona muy céntrica y repleta de gente. El alcalde de la localidad, Carig Greenberg, ha pedido a los ciudadanos que se mantengan alejados de la zona y que no se acerquen. Se ha acordonado los alrededores de la entidad bancaria con el fin de recoger pruebas. Algunos de los trabajadores del banco han podido salvar sus vidas gracias al hecho de que se han podido encerrar dentro de la cámara acorazada.
Los tiroteos mortales en los Estados Unidos no se detienen
Hace solo dos semanas, otro tiroteo puso fin a la vida de seis personas en la ciudad de Nashville, en Tennessee. Una persona transgénero de 28 años entró con un arma de fuego en una escuela privada de educación religiosa y empezó a disparar, poniendo fin a la vida de tres profesores y de tres niños de 9 años. Los agentes policiales desplazados al lugar pudieron localizar y abatir a la tiradora, que también murió. Según las primeras investigaciones, la motivación del asalto fue la venganza y el resentimiento de la tiradora, que había sido antigua alumna del centro educativo.