Uno de los consejos más habituales que se dan a las personas que van en coche es que nunca dejen a la vista objetos de valor, ya que pueden llamar la atención de posibles ladrones que romperán el cristal del vehículo para llevarse cualquier cosa que puedan vender después. Ahora, el problema ha empeorado, porque, con esta nueva herramienta, los delincuentes pueden saber si tenemos móviles, ordenadores o cualquier tipo de aparato electrónico en el coche, aunque estén bien escondidos.
Este objeto que avisa a los ladrones es ni más ni menos que un detector de litio, un pequeño aparato que es capaz de detectar la radiación de todos aquellos dispositivos que tienen este material indispensable para hacer los chips que tenemos en nuestro móvil y en prácticamente cualquier otro aparato. Funcionan de la misma manera que los típicos detectores de metales que a veces se ven en las playas, donde la gente busca tesoros escondidos, pero si alguien se acerca con un detector de litio a nuestro coche, el único botín que busca es el ordenador que podemos tener en el maletero. Además, el escáner no solo les dice si tenemos o no un aparato en el coche, sino que marca con gran precisión en qué parte del vehículo está, por lo cual el ladrón sabe, antes de forzar el coche, si el objeto está en el maletero, en el asiento trasero o en la guantera, el que hace todavía más rápido el hurto.
Evitar el robo
Hay detectores de litio bastante caros, que pueden llegar a costar miles de euros, que son capaces de detectar incluso objetos con la batería apagada, pero los que utilizan a los ladrones generalmente son muy baratos, y se pueden conseguir por unos veinte euros, una inversión que pueden recuperar con el primer robo. Para evitar ser víctimas de un hurto de este estilo, lo mejor que se puede hacer es no dejar ningún tipo de aparato que no queremos perder en el coche, pero en caso de que sea indispensable, nos tenemos que asegurar siempre que el Bluetooth esté apagado, ya que si no es el caso, la señal es todavía más fuerte y más fácil de detectar, y tener apagado el dispositivo, porque de esta manera la radiación que expulsa la batería es muy poca, y puede ser que el detector no la capte y nuestro aparato continúe a buen resguardo cuando volvemos al coche.