El pasado martes, 20 de septiembre, una niña de tan sólo tres años pasaba las peores siete horas de su vida al haberse quedado atrapada dentro de un autobús escolar, en Sitges. Ahora, sólo tres días después, la historia se repite, esta vez en Madrid y con un giro surrealista en la historia: un niño, también de tres años, pasa cuatro horas cerrado en el coche esperando a su padre, que lo había dejado allí mientras él visitaba un prostíbulo situado justo al otro lado de la calle. Los hechos ocurrieron la noche del pasado jueves, 22 de septiembre, en el distrito madrileño de San Blas. Agentes de la policía municipal de Madrid encontraron al pequeño y, después de indagar, localizaron y detener al padre del niño, a quien acusan de un presunto delito de abandono temporal del menor.
El niño, de solo tres años, estaba completamente solo en el coche
Ya entrada la noche del pasado jueves, dos agentes de la policía municipal de Madrid patrullaban a pie las calles del distrito de San Blas cuando vieron una cosa sospechosa dentro de un vehículo estacionado en la vía pública. Los policías se acercaron al vehículo, en el interior del cual había un niño de solo tres años, completamente solo y sentado en el asiento de copiloto. Lo saludaron desde fuera dando golpes en la ventana, sorprendiéndose cuando, al intentar sacar al niño del coche, comprobaron que el vehículo estaba abierto, tal como narra El País. Los agentes preguntaron al niño dónde estaban sus padres, y el pequeño, sin dudarlo, señaló con el dedo un local que había justo en el otro lado de la calle. Se trata de un negocio anunciado como una supuesta discoteca, la disposición de la cual, con dos plantas y múltiples habitaciones en la segunda, así como el cartel luminoso de la silueta de una mujer en una postura sugerente no dejaban lugar a dudas: realmente, la discoteca era un local de citas o, en otras palabras, un prostíbulo.
Después de hacer las indagaciones y comprobaciones pertinentes, los policías consiguieron localizar a la madre del niño, reuniéndolos posteriormente. A continuación, los agentes accedieron al interior del prostíbulo con el fin de encontrar al padre. El hombre, sin embargo, al ver a los agentes en el local intentó huir de este, sin éxito. Los policías lo interceptaron cuando el hombre trataba de salir sin ser visto por las salidas de emergencias del establecimiento, después de haber estado ahí cerca de cuatro horas, tal como pudieron corroborar los agentes a través de las cámaras de seguridad.
No era la primera vez que el padre dejaba al niño al coche mientras visitaba el prostíbulo
Esta situación, sin embargo, no era la primera vez que pasaba, tal y como pudieron constatar los agentes. Después de interrogar a los trabajadores del local de citas, estos los informaron de que el padre del niño era un cliente habitual del prostíbulo, y que en más de una ocasión había dejado al niño al coche mientras él hacía de las suyas. Los agentes detuvieron al hombre, de nacionalidad española y 36 años de edad, acusado de un presunto delito de abandono temporal de menores, y recalcan el peligro que supone no solo dejar al niño al coche, sino con el vehículo completamente abierto, ya que el niño podía salir y exponerse a peligros, o alguien podía intentar acceder al coche.