Novedades del crimen de las niñas de Tenerife: los investigadores piensan que Tomás Gimeno tiró el móvil en el mar, navegó unas millas y, finalmente, se suicidó.

Tomás Gimeno secuestró y asesinó a sus hijas

El 27 de abril Tomás Gimeno secuestró a sus hijas y, presuntamente, las asesinó para causar el máximo sufrimiento a su expareja, que había decidido cortar con él. Aunque la madre de Anna y Olivia tenía esperanza en que sus hijas estuvieran vivas, después de semanas buscándolas por el mar, la peor de las hipótesis se cumplió: encontraron el cadáver de la hermana mayor, una niña de seis años, Olivia.

Tomás Gimeno habría asesinado a sus hijas en Tenerife / Instagram

Se suicidó tirándose en el mar

La Guardia Civil, que es quien se encarga de la investigación, no descarta ninguna hipótesis, pero piensan que la teoría que tiene más fuerza es que Tomás Gimeno, después de asesinar a sus propias hijas, se suicidó tirándose en el mar.

El último mensaje que envió al padre fue a las 2:27 del 28 de abril y el geolocalizador lo sitúa en tierra firme, no en el mar. No obstante, a causa del desnivel, podría ser que en realidad se encontrara en el mar aunque el geolocalizador indicara el contrario, piensan los policías.

Los investigadores piensan que Tomás Gimeno tiró el móvil en el agua y que después de navegar unas millas se suicidó / Lo Caso

Tiró el móvil en el agua y navegó unas millas

Así pues, los guardias civiles piensan que, después de enviar este último mensaje mientras estaba en el mar, tiró el móvil en el agua, navegó unas millas y, posteriormente, se suicidó tirándose en el agua, según informa La Vanguardia. Esta misma hipótesis es la misma que sostienen desde SOS Desaparecidos, desde donde aseguran que están 98% seguros que Tomás Gimeno se suicidó, pero que el 2% restante angustia a Beatriz Zimmermann, la madre de las pequeñas.

El barco Ángeles Alvariño sigue rastreando la costa de Tenerife

Actualmente, el barco Ángeles Alvariño sigue rastreando la costa de Tenerife con la esperanza de encontrar el cuerpo de Anna, la niña de 1 año, y de su padre. Zimmermann espera que puedan encontrar los dos cadáveres para poder vivir tranquila sin la angustia de no saber exactamente qué pasó.