Las muestras extraídas del coche de Miguel Ricart y Antonio Anglés, los dos asesinos de las niñas de Alcàsser, han sido negativas para la investigación, ya que no se ha podido obtener el ADN que permitiera encontrar a más sospechosos. No obstante, se harán nuevas pruebas con nuevas muestras encontradas en el lugar del crimen que podrían ser clave para saber la identidad del tercero implicado en el triple asesinado.
Según la sentencia judicial, Miguel y Antonio no actuaron solos: es muy probable que lo hicieran con la ayuda de una tercera persona, aunque no se ha podido determinar quién era. De hecho, la inspección fallida en el coche de los asesinos era clave para encontrar a este tercer hombre. No obstante, a pesar de los esfuerzos de los médicos forenses, no han podido extraer el ADN.
Un nuevo análisis con las muestras del lugar del crimen, la esperanza para cerrar el caso
Pero todavía hay un hilo de esperanza para conseguir cerrar el caso. Se trata de uno nuevo análisis que harán desde el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses. Cogerán las muestras encontradas al lugar del crimen, que está en una caseta del paraje de La Romana, la ubicación de Tous (Valencia) donde encontraron los cadáveres de Toñi, Míriam y Desirée.
Siete sospechosos, tres de los cuales son amigos de Antonio
Lo que se hará en este segundo caso es analizar el pelo encontrado tanto en la caseta, como en la fosa, como el colchón, como el entorno próximo del triple asesinado. Si consiguen extraer el ADN, lo compararán con el de siete sospechosos, tres de los cuales son amigos de Antonio Anglés que colaboraron con él en otros hechos delictivos.
De momento, no ha trascendido la fecha de inicio de estas pruebas, que serán determinantes para descubrir la presunta implicación de un tercer hombre. Se trata de la última vía para saber qué pasó aquel 13 de noviembre de 1992, cuando los dos asesinos secuestraron a las tres adolescentes de 14 y 15 años para, posteriormente, agredirlas sexualmente, torturarlas y asesinarlas.
Antonio Anglés, uno de los fugitivos más buscados en el ámbito internacional
Si no consiguen extraer el ADN de estas nuevas pruebas, será muy complicado poder cerrar el caso, a no ser que Antonio Anglés aparezca, unos hechos muy improbables, pero no imposibles, ya que se ha convertido en uno de los fugitivos más buscados en el ámbito internacional. La última pista de este peligroso fugitivo estuvo en Irlanda, ya que se fue de España después del crimen.