Teresa es una mujer que ha sido detenida por asesinar a su marido en Serbia. Para hacerlo, lo drogó, le clavó varias puñaladas y le cortó los genitales con una motosierra delante de la hija menor de edad, que fue a quien alertó a Emergencias de lo que estaba pasando en el interior del piso.
Los hechos pasaron el martes de la semana pasada en Zrenjanin, una ciudad de Serbia. La presunta autora de los hechos se llama Teresa Peric y tiene 46 años. La víctima se llamaba Srdjan Peric y tenía 42. Este hombre tenía una orden de alejamiento hacia la presunta asesina, pero la incumplió.
La asesina ya lo intentó matar con anterioridad
La víctima y la asesina tenían problemas constantemente y las discusiones y las peleas eran constantes, sobre todo por celos. Según explican los medios de Serbia, incluso, en una ocasión, Teresa prendió fuego a la cama donde dormía el hombre con la intención de matarlo, aunque no lo consiguió.
Lo mató de la manera más cruel posible
Según explica la hija de la presunta asesina, esta le había dicho en más de una ocasión que quería matar a su marido. El adolescente le pidió que no lo hiciera, pero el 10 de mayo cumplió con lo que dijo y mató a Srdjan de la manera más cruel posible.
Se le tiró encima y lo empezó a apuñalar
Se trata de un asesinato premeditado y Teresa lo hizo de tal manera que la víctima no se pudiera defender. Se esperó a que se durmiera y se le lanzó encima y lo empezó a apuñalar. Cuando los policías entraron en el interior del domicilio, pudieron comprobar que el hombre había sufrido una muerte muy violenta.
La hija ve cómo le está cortando los genitales con una motosierra
La hija de ella, al oír los gritos de dolor del padrastro, inmediatamente, avisó a su hermano y fueron los dos a la habitación y pudieron comprobar que su madre le estaba cortando los genitales con una motosierra.
Teresa cocinó los genitales del hombre: se les quería comer
El hombre tenía una orden de alejamiento hacia Teresa, ya que, presuntamente, la maltrataba, motivo por el cual estuvo 30 días detenido. Teresa tenía una orden de protección, pero el hombre la incumplió y se fueron a vivir juntos.
Según las investigaciones policiales, Teresa cocinó los genitales del hombre con la intención de comerlos y ha quedado detenida como presunta autora de un delito de asesinato. Se prevé que la detención dure 30 días y está a la espera de pasar a disposición judicial, donde muy probablemente se dictaminará su entrada en la prisión de manera provisional y sin fianza.