Los Mossos d'Esquadra del distrito de Sant Martí, en Barcelona, recibieron este jueves 13 de noviembre, cuando pasaban nueve minutos de las cuatro de la tarde, la alerta que informaba del hallazgo del cuerpo sin vida de un hombre en el interior de un domicilio. Hasta la vivienda se desplazaron varias unidades de la policía catalana, que no pudieron hacer nada para salvar la vida del hombre y que, además, pudieron constatar que su cuerpo presentaba signos de violencia. En la vivienda, que según ha podido saber El Caso.com, se encuentra en el número 9 de la calle de Nàpols de Barcelona, se activaron los agentes de la Policia Científica y de la Divisió d'Investigació Criminal, que empezaron a analizar e inspeccionar minuciosamente la escena del crimen para saber qué había pasado, qué motivos habían desencadenado el asesinato y quién había sido el autor.
Alerta de suicidio
Mientras los Mossos d'Esquadra trabajaban y tomaban declaración a los vecinos de la vivienda donde se había producido el hallazgo, la sala de mando envió la alerta a una patrulla de la Unitat de Seguretat Ciutadana de la comisaría de Sant Martí que informaba que un hombre se había intentado suicidar en el metro de Barcelona. Los agentes identificaron al hombre y los investigadores comprobaron que los datos facilitados del individuo que se había intentado matar coincidían con los de la víctima que habían encontrado.
Tras realizar las gestiones pertinentes, los investigadores de los Mossos d'Esquadra pudieron relacionar a ambas personas: eran padre e hijo. Con todo, los agentes detuvieron al hombre, de 48 años, como supuesto autor del asesinato de su progenitor. La policía catalana, sin embargo, no ha comunicado la nacionalidad ni los antecedentes policiales del individuo.
El detenido fue trasladado a un centro hospitalario con pronóstico grave, donde continúa ingresado. Los Mossos d'Esquadra, ahora, investigan la muerte del hombre como un caso de violencia doméstica y trabajan para saber cuáles fueron los motivos que hicieron que el hijo actuara de esta manera. El caso se encuentra bajo secreto de actuaciones y la policía catalana mantiene todas las hipótesis abiertas. A estas alturas, se desconoce cuál era la relación paternofilial y si el detenido actuó con plenas facultades mentales.