Desde primera hora de la mañana los Mossos d'Esquadra tienen en marcha un dispositivo antidroga de la División de Investigación Criminal (DIC) contra una organización internacional dedicada al cultivo y tráfico de marihuana. A las seis de la mañana ha arrancado la operación, bautizada como Caso Copérnico, con un centenar de agentes, una veintena de registros en varios puntos del área metropolitana de Barcelona, así como una decena de detenidos. El objetivo de esta investigación, que se explota hoy, es desmantelar una organización dedicada al narcotráfico, sobre todo de marihuana, si bien la policía no descarta poder localizar, en los registros, otros tipos de drogas, como el hachís, según ha podido saber ElCaso.com. Los investigados son miembros de varias redes criminales, según fuentes de la investigación.

 

Las principales entradas —pisos, almacenes y plantaciones— se están haciendo en Barcelona y municipios cercanos, como Sant Adrià de Besòs, Terrassa y Badalona, pero también en Sant Esteves Sesrovires y Corbera de Llobregat, en el Baix Llobregat, y también en Vallgorguina y en Premià de Dalt, en el Vallès Oriental y en el Maresme, respectivamente. En total se están haciendo una veintena de entradas y registros bajo la tutela judicial y, a estas alturas, hay una decena de detenidos. Los cacheos se están haciendo con la presencia del juez que ha tutelado esta investigación contra el crimen organizado y el narcotráfico internacional, el Juzgado de Instrucción 4 de Badalona.

Se han hecho una veintena de entradas y cacheos durante este mañana / GRS

La investigación está liderada por la unidad central de la DIC que se dedica a la investigación de delitos transnacionales. Los objetivos hasta ahora detenidos son de nacionalidad extranjera, sobre todo albaneses, y también de nacionalidad española. En concreto, los Mossos han cazado a los dos líderes de esta banda, los dos españoles, en las entradas de Ripollet y Sant Adrià, respectivamente.

 

El modus operandi de este entramado criminal, según han explicado fuentes policiales a ElCaso.com, consistía en comprar marihuana a organizaciones más pequeñas, habitualmente formadas por delincuentes de la Europa del Este, de varias plantaciones indoor, como la que se ha desmantelado esta mañana en un chalet de Vallgorguina, y después venderlas a otras organizaciones criminales. Los jardineros contratados para la custodia y el cultivo de las plantas eran originarios de Albania.

Los delincuentes tenían la luz pinchada para alimentar las plantaciones / GRS

Tráfico de marihuana en Catalunya

Las comarcas de todo el país se han convertido en auténticos jardines que los narcotraficantes, la mayoría con el mercado internacional como objetivo, utilizan para cultivar marihuana, en plantaciones de interior y de exterior. Esta investigación que finaliza su primera fase hoy, de la cual todavía no se han conocido muchos detalles por el secreto de sumario, quiere atacar a esta mafia que se está haciendo fuerte en Catalunya con el tráfico de marihuana, un negocio muy rentable y que cada vez genera más problemas de seguridad.

Agentes del ARRO, de la Unidad Canina y de Seguridad Ciudadana están participando en los cacheos / GRS

La mayoría de los incidentes con armas de fuego con heridos o personas muertas, como el tiroteo de hace pocos días en Sils, en la Selva, o en Girona, con una persona herida con tiros en las piernas, están relacionados con el tráfico de drogas y, muchos de ellos, vinculados a la marihuana. En las entradas de hoy participan más de un centenar de efectivos de diferentes unidades: Investigación, ARRO, Canina y Seguridad Ciudadana.