La madrugada del 1 de noviembre de 2021, en Igualada (Anoia, Barcelona), un camionero encontró medio desnuda y casi muerta a una chica de 15 años junto a la discoteca Epic donde se acababa de celebrar la fiesta de la Castañada. Su agresor, que estuvo varios meses a poder ser pillado, la había abandonado después de agredirla de manera brutal, casi torturada, y haberla violado. La chica estaba inconsciente y tuvo que ser operada varias veces con el fin de poder recuperarse de las heridas de aquella brutal agresión sexual que sufrió después de salir de fiesta y cuando ya tenía que ir hacia casa, en el Garraf. El hombre que supuestamente lo hizo fue detenido por los Mossos d'Esquadra el mes de abril de 2022, meses después de los hechos, y cuando todo el mundo ya imaginaba que el caso quedaría sin resolver. La Unidad Central de Agresiones Sexuales (UCAS) de la policía pudo cerrar el círculo después de encontrar indicios y haber detectado que uno de sus sospechosos ya había sido denunciado por agresión sexual, concretamente, contra su hermana menor de edad.
Brian Raimundo C.M., cuando tenía 15 años, el año 2016, fue denunciado por intentar violar a su hermanastra pequeña, de nada más 7 años, mientras estaba alojado con la familia en un camping. El Juzgado de Menores de Girona lo condenó en su día a un año de internamiento. Sin embargo, la pena fue suspendida bajo la condición que cumpliera con la libertad vigilada, siguiera un tratamiento psiquiátrico y acudiera a desintoxicación. Los Mossos también fueron conocedores que una pareja del sospechoso había denunciado maltrato y confirmaron que el detenido le regaló una chaqueta que robó a la víctima.
Antecedentes y un vídeo, clave para saber quién era
Los antecedentes fueron también importantes para la policía para poder detenerlo y entrar en su casa, en el centro de Igualada, dónde agentes de la Policía Científica encontraron la ropa que utilizó el día de los hechos y restos que sirvieron para incriminarlo. La investigación se desencalló cuando un hombre, un piloto de avión, entregó un vídeo a los Mossos donde salía un grupo de personas y donde salía el sospechoso. Ahora, más dos años y medio después de los hechos el caso llega a juicio y el hombre, de nacionalidad boliviana, se enfrenta a una condena de 45 años de prisión por agresión sexual y por tentativa de homicidio.
El caso será juzgado en la sección 10 de la Audiencia de Barcelona y está previsto que se alargue hasta el viernes, si bien este guion puede variar. Antes de arrancar, se supo la semana pasada, ya cambió. La víctima no tendrá que declarar durante la vista oral, ya que el tribunal ha aceptado la prueba preconstituida, es decir, la declaración grabada de la joven durante la fase de instrucción del caso, de que se reproducirá a puerta cerrada. En aquel interrogatorio, que ya se hizo con todas las partes personadas, se pudieron hacer preguntas a la joven, que tiene 16 años, y respondió todo el que fue necesario. Ahora, durante el juicio, se tendrá en cuenta aquella declaración, y se evitará que la chica vuelva a tener que ver la cara al monstruo que la violó y torturar hace más de dos años.
La siguió y la llevó a una zona solitaria
Según se pudo acreditar durante la investigación hecha por los Mossos d'Esquadra, tesis avalada por la Fiscalía, Brian Raimundo C.M. siguió a la joven por las calles de Igualada y la atacó "de manera repentina" después de hacerla ir hasta una zona "solitaria y sin testigos, poco iluminada y sin cámaras", para agredirla sexualmente. La tortura duró más de 20 minutos. Dio golpes a la chica en varias partes del cuerpo, mientras la sujetaba con fuerza, y la penetró "de manera brutal", incluso con objetos, demostrando así su "absoluto menosprecio a su condición de mujer", asegura la Fiscalía. Después de la violación, el detenido propinó a la víctima un "fuerte golpe a la cabeza con un objeto contundente", la dejó abandonada a tierra y huyó del lugar. Le robó la ropa y escapó. La encontró un camionero, inconsciente y muerta de frío.
La chica sufrió un traumatismo craneoencefálico y una ruptura craneal, además de otras lesiones por todo el cuerpo, por lo cual tuvo que estar ingresada durante tres días en la unidad de cuidados intensivos y casi un año hospitalizada. La joven sufre secuelas un "estrés posttraumático grave y desestabilización personal", ya que las lesiones causadas, en la mayoría de los casos "mortales de necesidad", pusieron su vida en peligro.
Será interrogado durante el juicio
Este lunes se prevé que sea interrogado el detenido, que será trasladado desde la prisión por los Mossos d'Esquadra, donde ingresó después de ser detenido en abril de 2022. Sin embargo, en algunos casos los acusados, si lo solicita su defensa y lo acepta el tribunal, se podría hacer el último día del juicio. Las partes esperan un juicio rápido, han explicado a ElCaso.com, por todos los indicios que se convertirán prueba durante el juicio que arranca este 17 de junio, sobre todo el ADN que los Mossos encontraron en la habitación de él, que fue registrada por la Unidad Central de Inspecciones Oculares de la Policía Científica, el día que fue arrestado. Al mismo tiempo, también celebran que la chica agredida, que todavía está bajo tratamiento psiquiátrico, no tenga que comparecer durante el juicio y no evitar tener que estar en la misma sala que Brian Raimundo C.M., el hombre que, supuestamente, la agredió sexualmente en Igualada la noche de la Castañada de hace dos años.